Texto y fotografías: Jesús Saavedra

Chilpancingo, Gro. 22 septiembre 2019. / Este domingo concluyó el primer encuentro de Derechos Humanos y Construcción de la Paz en Guerrero, donde una veintena de organizaciones hicieron un llamado a los tres niveles de gobierno a poner a las víctimas de la violencia en el centro de acciones de políticas públicas que les den una atención adecuada.


Desde el pasado viernes se inició con este encuentro en las instalaciones del Centro de Derechos Humanos de Víctimas de la Violencia «Minerva Bello» en esta capital donde asistieron una veintena de agrupaciones en donde aseveraron que se trata de «construir un espacio de escucha, de compartir experiencias y herramientas para fortalecer las capacidades organizativas y la lucha social en los procesos de defensa de los derechos humanos y construcción de paz», indicó, Filiberto Velázquez Florencio director de este Centro.


En conferencia al concluir el encuentro, Viridiana Martínez Ortiz del Centro de Derechos Humanos «Fray Francisco de Victoria» explicó que la reunión va encaminada a buscar los mecanismos para llegar a los procesos de construcción de la paz en una entidad donde hay violencia y violaciones a los derechos humanos.


Martínez Ortiz, sostuvo que los tres niveles de gobierno deben poner atención a las víctimas de la violencia, «deben de tener un proceso integral en donde las víctimas estén al centro de cualquier acción de política pública y considerando las necesidades puntuales de la región».


Afirmó que la mayoría de las víctimas en Guerrero, «viven una violencia estructural donde el estado es incapaz de garantizar que las víctimas que habitamos este territorio podamos vivir dignamente, a nivel federal se ha mostrado una voluntad política, se tiene que cristalizar en acciones concretas y coloque de cualquier decisión en el centro a las víctimas, hay una violencia y un horror que se está viviendo en Guerrero, hay ejercicios de buscar una justicia digna que considere las diferentes realidades en Guerrero».


Gerardo Gómez del Centro «Minerva Bello» explicó que en el encuentro participaron veinte organizaciones de Guerrero de diferentes regiones, colectivos de víctimas y organizaciones de derechos humanos, «empezamos a armar redes, a tratar de resolver conflictos de manera no violenta, conflictos internos entre colectivos y organizaciones para que en lugar de diferencias busquemos coincidencias con objetivos comunes».


Indicó que en el encuentro, «evidentemente se habló de las distintas instituciones que deberían estar involucradas en la construcción de la paz, vimos que las madres buscadoras van encuentran los cuerpos y sufren más porque no hay medios para los análisis de ADN e identificación de los cuerpos, es otra violencia institucional».


Gerardo Gómez, citó un caso en este encuentro de una madre de familia que busca a sus familiares desaparecidos hace varios años que trabaja en la dirección de Bibliotecas de la Secretaría de Educación en Guerrero (SEG), «por ir a buscar a sus familiares le están dando escoger o su trabajo o ir a buscar a sus familiares, no puede ser que la pongan en esa situación, es una violencia institucional al no facilitar su labor».


Agregó que se trató de un encuentro «para aprender herramientas de como resolver conflictos al interior y al exterior, uno de los temas fue precisamente el tema de la desaparición forzada, de las problemáticas del desplazamiento, de la violencia a las mujeres, es parte de un proceso de acompañamiento que queremos construir en Guerrero, nos encontraremos con otros Centros y hacer encuentros con colectivos de Guerrero».


Velázquez Florencio director del «Minerva Bello», recordó que hace un año había una cifra oficial de 751 cuerpos sin reconocerse en el Servicio Médico Forense (Semefo) y que hace unos días las autoridades de Salud han informado que ya son 900 cuerpos sin identificar.


Manifestó que hace más de un año se firmó con la Cruz Roja Internacional para la identificación de esos 751 cuerpos con una inversión de 20 millones de pesos, «pero no vemos resultados concretos, la construcción de esta red es para monitorear y exigir respuestas a esos programas que se anuncian, que los recursos públicos estén bien invertidos y se apliquen como deben de ser».


Finalmente dijo que las conclusiones de ese ejercicio colectivo «es que las voces puedan enfocarse en las necesidades de las víctimas porque tuvimos desde la Policía Comunitaria, Colectivos de Familiares de Desaparecidos, organizaciones campesinas, víctimas de ejecuciones extrajudiciales y debemos ver cómo nos apoyamos mutuamente».

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