Texto: Bernardo Torres
Chilpancingo, Gro. 26 noviembre 2019.- Cimbrada la ciudad por la desaparición de 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa el 26 de septiembre de 2014, meses después surgió el colectivo «Los Otros Desaparecidos de Iguala», para buscar a más de 300 personas desaparecidas, organización que este 26 de noviembre cumplió cinco años de búsquedas.
En conmemoración un centenar de familiares de personas marcharon primero hacia el centro de la ciudad de Iguala, y en la explanada del Monumento a la Bandera realizaron un pronunciamiento, donde exigieron a las autoridades estatales y federales cumplir sus compromisos de continuar con las búsquedas, y reiniciar los trabajos de identificación de los más de 700 cuerpos que hay en el Servicio Médico Forense.
Al frente de la marcha, llamó la atención un grupo de niños vestidos de blanco que portaban globos blancos; eran los hijos, de las más de 300 personas desaparecidas que busca este colectivo, y junto con el resto del contingente coraban la célebre frase «vivos se los llevaron, vivos los queremos», «¿Dónde están, dónde están, nuestros padres dónde están?».
Después del mitin, continuaron su marcha a sus oficinas donde se llevó a cabo el informe por los cinco años de este colectivo, al cual acudieron representantes de la Federación, del Gobierno del Estado y de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero.
Adriana Bahena Cruz, secretaria general del Colectivo Los Otros Desaparecidos, señaló que el panorama de violencia e impunidad que se vive en Guerrero, han sido un freno para que las familias denuncien los casos, pero contra todo eso más de mil familias se han acercado para pedir ayuda para buscar a sus desaparecidos.
«Muchas de ellas han llegado, nos han abierto su corazón, nos han manifestado el miedo tan grande que tienen, en el que viven, y por decisión propia han hecho una pausa, pero con la esperanza de regresar», dijo.
Desde el 26 de noviembre cuando iniciaron los trabajos de búsqueda, informó han sido recuperados 190 cuerpos, la mayoría en fosas clandestinas, lo que los posicionado como el colectivo con mayor efectividad, y donde tienen al mejor buscador, que con sólo una varilla implementó el mejor método para descubrir cementerios clandestinos.
En Iguala, dijo, hay un grupo de 40 personas que conforman el grupo de buscadores, gracias a quienes se han dado los resultados presentados en su informe, logrando además entregar 44 cuerpos a sus familiares, «se dice fácil, pero yo busco el mío y quizá nunca lo encuentre, y gloria Dios si no lo encuentro, porque me ha permitido hacer un esfuerzo sobre humano para que el corazón de una madre pueda tener paz, para que unos hijos puedan decir, aquí está depositado mi padre».
Adelantó, que están en un proceso de poder entregar siete cuerpos más a sus familias, que podrán descansar finalmente, por lo que hizo también un llamado urgente a que se continúe con la identificación de los 751 cuerpos en los Semefos, donde seguramente están los familiares que muchos buscan.
«Mi corazón y mi fe me dicen que muchos de los familiares que buscamos están en esos Semefos, y que nosotros podemos acercar, pero tenemos que hacer lazos de interlocución en paz, programas y agendas de trabajo, ya las víctimas están cansadas, no han parado de llorar y no ven resultados efectivos», enfatizó.
Destacó también, que durante los últimos años, han podido localizar a 10 personas con vida, de quienes por seguridad no de revelaron datos, pero el trabajo realizado desde adentro puede verse desde fuera, y se siguen generando las condiciones para que quien tenga un desaparecido, cuente con apoyo.
Adriana Bahena, señaló, que el trabajo del colectivo seguirá «hasta que las fuerzas se acaben», pues hay aún 346 expedientes de personas desaparecidas, esperando que alguien los encuentre.