Texto: Juan Blanco
Chilpancingo, Gro. 27 marzo 2020.- El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), delegación Chilpancingo, Joel Moreno Temelo dijo que las más de 400 empresas agremiadas a esta organización no tienen previsto cerrar, ante la contingencia por el Covid-19.
No obstante, dijo que si las autoridades de salud les recomiendan suspender sus labores no tendrán otra opción más que cerrar, lo que provocaría el despido de 5 mil trabajadores en la capital.
Pero, dijo que sería difícil reabrir y evitar el quiebre de las 400 empresas, si el Gobierno Estatal y Federal no crean un plan de reactivación económica para su rescate, después de pasada la contingencia.
Entrevistado este viernes, el dirigente informó que luego de los primeros casos confirmados de Coronavirus en Guerrero, los ingresos monetarios en las empresas disminuyeron considerablemente por las «bajas ventas».
Actualmente, dijo, las empresas en construcción están trabajando en un 40 por ciento, las expendedoras de alimentos en un 30 por ciento y las empresas de comercio común en un 50 por ciento.
«Lo que hemos estado pidiendo a ellos (a los dueños de las empresas) es de que tengan paciencia, la calma de poder esperar de alguna forma a ver de qué manera vienen los apoyos por parte de los gobiernos tanto federal y estatal, y sobre todo haciéndoles mención de que necesitamos dedicarnos al tema de la prevención», detalló.
Moreno Temelo dijo que ante esta contingencia, es necesaria una campaña de orientación de los empresarios hacia sus trabajadores, para que se sigan manteniendo sus negocios abiertos. «Yo sé que económicamente va ser difícil, pero no podemos cerrar».
Dijo que actualmente ninguna empresa ha cerrado a causa del Coronavirus, y que los 100 negocios que mencionan los medios de comunicación, dejaron de vender no exactamente por esta pandemia, sino porque sus estrategias comerciales no fueron las óptimas.
El dirigente dijo que están implentando mecanismos comerciales para que la economía no «salga de Chilpancingo, que el dinero siga circulando en la ciudad» y con ello las empresas continúen con actividad.
No obstante, informó que si se los indican, cerrarán. «Cuando la autoridad federal marque una emergencia sanitaria como tal después de que emita la fase tres de contingencia, es obligado y nosotros no nos vamos a poner en contra, porque eso es ir en contra de la salud de todos».
Dijo que en caso de que cierren las 400 empresas en la capital, más de 5 mil empleados serían despedidos, «pero no estaríamos hablando de empleos sino se familias en problemas, porque los trabajadores son cabeza de familia».
Pero además, advirtió que sería complicado volver a aperturarse y evitar su quiebre, si no hay apoyo del Gobierno Estatal y Federal. «Sería un problema grave», sentenció.