Texto: Staff
Chilpancingo, Gro. 30 agosto 2020.- El Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México inició este domingo una campaña de recolección de firmas para entregarlas al gobierno federal y a la Fiscalía General de la República (FGR), en donde demandan la identificación de 37 mil cuerpos que están sin reconocer y que la búsqueda de personas en vida se convierta en un objetivo central de este gobierno.
Lo anterior en el marco del día internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, lo cual fue decretado en una asamblea general de la ONU en el 2010 y que sirvió de marco para una campaña en redes sociales desde el pasado lunes de generar empatía con este Movimiento que sostiene que en México hay más de 75 mil víctimas de desaparición forzada.
Ayer a través de la plataforma www.change.org, se lanzó esta campaña de recolección de firmas para respaldar un escrito dirigido al presidente, Andrés Manuel López Obrador; la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas Rodríguez y al titular de la FGR, Alejandro Gertz Manero.
El objetivo era el de recolectar 150 mil firmas, pero antes de las 3 de la tarde ya se había cumplido este objetivo del Movimiento que aglutina a 60 colectivos de Familiares de Desaparecidos en el país (incluidos una docena de Guerrero) y 40 organizaciones civiles.
En el documento consideran que es «urgente la búsqueda de personas desaparecidas en vida y la identificación forense. En México, ante la crisis de personas desaparecidas y sin identificar, las familias decidimos desde hace años tomar palas y picos para buscar a nuestros seres queridos».
Sostienen que las madres aglutinados en los colectivos «fuimos de las primeras en denunciar que México se convirtió en un país de fosas clandestinas. Fuimos las primeras en hacer pública la crisis de identificación de personas al ver que los Semefos (Servicio Médico Forense) no contaban con protocolos adecuados de actuación ni personal especializado como peritos o médicos forenses capacitados».
Y consideran que es «inhumana la crisis de identificación que el Estado mexicano ha provocado desde que inició la llamada Guerra contra el narcotráfico, donde más de 26 mil personas que están en las morgues, los Semefos y las fosas comunes no han sido reconocidas, mientras que sus familias les siguen buscando».
Por ello decidieron en los colectivos crear el Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México, «para impulsar y contar con una Ley sobre Desaparición, que tenga en el centro la búsqueda de personas desaparecidas en todas sus formas (vida y muerte). Exigimos que la identificación de personas fallecidas sea una prioridad para las autoridades del actual gobierno, sin embargo, también consideramos que debe tener el mismo nivel de importancia la búsqueda en vida».
El Movimiento sostiene que su «dolor lo convertimos en lucha digna, hemos desarrollado experiencia, capacidades y herramientas que nos permitieron crear leyes, buscar y contribuir a construir la paz que México tanto necesita».
Y le plantean directamente al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, «la dentificación de las más de 37 mil personas que se encuentran en morgues, Semefos y panteones (forenses). Que la búsqueda en vida se convierta en un objetivo central para este gobierno y cree los protocolos de investigación y de búsqueda necesarios, para que las Fiscalías Especiales de Desaparición y las Comisiones de Búsqueda se puedan coordinar y actuar de manera inmediata en la búsqueda de personas desaparecidas».
Demandan además: «la adecuada implementación del Protocolo Homologado para la Búsqueda de Personas Desaparecidas y No Localizadas aprobado esta semana. Así como la debida conformación del nuevo Mecanismo Extraordinario de Identificación Forense (MEIF), creado en diciembre de 2019, a través de la designación de un grupo coordinador que asegure su funcionamiento».
Finalizan el documento diciendo que México «requiere que dejen de existir las desapariciones, que se busquen a todas y a todos y que se ayude a regresar a casa a miles de personas sin identificar. Las familias tenemos mucho que aportar; nadie sabe mejor que nosotras lo que se requiere para que se logre una identificación y búsqueda efectiva. Nuestro principal motor es encontrarles a todas y todos», añadieron.