Texto: Juan Blanco
Chilpancingo, Gro.,13 de septiembre de 2020. – Un grupo de vecinos de varias colonias de Chilpancingo, denunció públicamente este domingo que no les han entregado sus resultados de la prueba de detección de Covid-19 que se realizaron hace más de un mes y medio en los módulos gratuitos que se instalaron en diversos puntos de la capital.
También acusó que el personal del Laboratorio de Diagnóstico e Investigación en Salud (Labdis) de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), ni siquiera contesta las llamadas que realizan a los números telefónicos que les proporcionaron, y en donde se supone les confirmarían si están enfermos o no del virus.
El caso más emblemático es el del joven Alberto Bautista, quien relató que los primeros síntomas -tos y fiebre de 38 grados relacionados a la enfermedad viral- comenzó a padecerlos entre el sábado primero y domingo 2 de agosto del presente año.
Abundó que el lunes 3 del mismo mes su salud fue empeorando, pues no sólo seguía con la temperatura corporal alta y tos seca, sino también comenzó a perder el sentido del gusto y el olfato.
«Fue entonces que el martes 4 decidí realizarme la prueba en el módulo de la alameda. Para eso, yo llegué como a las 9:00 de la mañana, pero ya había como unas seis gentes esperando, el chiste es que me vinieron atendiendo hasta las 11:30», reñató.
Contó que tras la prueba, el personal del laboratorio le proporcionó un número de celular a donde tenía que llamar en caso de cualquier duda o aclaración, pero que hasta el momento no contestan las llamadas y tampoco le han entregado sus resultados.
Dijo que al día siguiente de haberse sometido al estudio, decidió ir al Hospital General «Raymundo Abarca Alarcón» donde le realizaron una tomografía y otros estudios médicos cuyos resultados arrojaron que sí estaba contagiado de Covid-19, sin embargo, dijo que los doctores solo le recetaron medicamento y lo enviaron a su casa a guardar reposo, dado que su salud aún no era crítica.
No obstante, agregó que el domingo 9 de agosto comenzó a padecer problemas respiratorios «y fue cuando yo ya me interno, y como el día 18 de agosto me dicen que tenían los resultados de la prueba del Covid, ¿cómo la obtuvieron, no sé?, pero qué tal si te mueres. Si yo me hubiera esperado hasta que en el módulo me entregaran los resultados de la prueba para saber si tenía o no Covid y no hospitalizarme, me muero», manifestó.
Dijo que el virus afectó sus pulmones en más de un 80 por ciento, «gritas de dolor, la desesperación, o sea, es horrible; yo no comí en los primeros siete días de internado».
Relató que durante los 18 días que estuvo internado en el área Covid del hospital, vio morir entre dos y cuatro pacientes de seis que internaban diariamente, entre ellas al sacerdote Ignacio Morales Pablo, encargado de la iglesia de San Judas Tadeo en la colonia Javier Mina, en esta ciudad, quien perdió la vida el 19 de agosto.
Tras más de 15 días de haber sido dado de alta del Hospital General, Alberto Bautista todavía presenta tos y gripe, y ante el riesgo de contagiar a más personas, aún guarda reposo en su casa, dice.
Los más de seis vecinos, entre ellos Alberto Bautista, quienes desde hace más de un mes y medio siguen esperando los resultados de la prueba de detección de Covid-19 que se realizaron en los diferentes módulos, hicieron un llamado a las autoridades de salud estatal y al Laboratorio de Diagnóstico e Investigación en Salud de la UAGro, a asumir su responsabilidad frente a la pandemia para evitar más casos como los suyos.