Texto: Bernardo Torres
Chilpancingo, Gro., 21 de enero de 2021.- El secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, rechazó las acusaciones realizadas por un presunto testigo protegido, en torno al caso Ayotzinapa, donde lo señalan de estar vinculado al Cártel Guerreros Unidos.
De acuerdo con lo publicado por el Diario Reforma «Juan», un testigo clave en las indagaciones sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, declaró ante la Fiscalía General de la República (FGR) que el actual titular de la seguridad capitalina, Omar García Harfuch, recibía mensualmente 200 mil dólares del cártel Guerreros Unidos.
La declaración del testigo protegido, a la que Grupo REFORMA tuvo acceso, se refiere a sobornos de dicha organización criminal a distintos mandos militares y policiacos para que les dejaran operar con impunidad en el estado de Guerrero.
«Omar García Harfuch, jefe de la Policía Federal en el estado de Guerrero, brindaba información sobre posibles operativos y facilitaba el trasiego de heroína, dinero y armas, los de Taxco y los (de) Guerrero, el único que supuestamente no estaba de acuerdo era el señor Dorantes”, aseguró el declarante cuya identidad está reservada.
En el marco de esa declaración es donde «Juan» implica a García Harfuch y a otros mandos. Según el testigo, el ahora jefe de la policía capitalina estaba «bien conectado» con la milicia por sus vínculos familiares, en referencia a que es nieto del General Marcelino García Barragán, secretario de la Defensa Nacional de 1964 a 1970.
«Juan» refiere que la nómina de Guerreros Unidos incluía a los Batallones 27 y 41 de Infantería, a cuyos militares pagaban de 60 mil a 120 mil pesos, según el rango, aunque señala que había un General que recibía hasta 5 millones de pesos.
Otros funcionarios que señala son Leonardo Octavio Vázquez Pérez e Iñaki Blanco, Secretario de Seguridad Pública y Procurador de Guerrero, respectivamente, en el Gobierno del perredista Ángel Aguirre. Estos funcionarios recibían 50 mil dólares mensuales, según lo dicho por «Juan».
Ante este señalamiento, el actual secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México reaccionó en redes sociales a través de una publicación.
«Niego categóricamente las declaraciones dolosas hechas contra mi persona por un delincuente, hoy testigo protegido, publicadas por Reforma. Mi trayectoria en el combate a la delincuencia organizada en distintos frentes habla por sí misma. No tengo nada que ocultar», dijo.