Texto: Bernardo Torres
Chilpancingo, Gro., 25 de enero de 2021.- El ex procurador de Guerrero, Iñaki Blanco Cabrera, aseguró que el presunto testigo protegido de la FGR, cuyo testimonio sobre el caso Ayotzinapa se filtró hace unos días, sólo mencionado como «Juan» es Gildardo Astudillo, alias «Gil» y miente en sus declaraciones.
Iñaki Blanco en entrevista con Ricardo Rocha, en su espacio en Radio Radiofórmula, acusó que «El Gil» o «Juan» miente en dos aspectos fundamentales, uno, en la presunta ejecución de indigentes y en lo relativo al hallazgo de restos humanos en el vertedero de Cocula.
Consideró que es preocupante que se construya una verdad paralela en torno al testimonio de un delincuente, que desconoce antecedentes haciendo apología de rencor y venganza en contra de quienes persiguieron a los responsables.
Dijo que basta comparar su testimonio con los chats de la DEA donde se prueba que este personaje intercambió mensajes con los hermanos Salgado Casarrubias, identificados como líderes de los Guerreros Unidos y que acató instrucciones que incidieron en la privación ilegal de la libertad de los 43 normalistas.
El ex procurador, dijo que se desecha además una investigación realizada por la CNDH que explica que la responsabilidad de corporaciones policiacas del ámbito local, estatal y federal son más por omisión, que sabiendo lo que estaba ocurriendo no actuaron ni reportaron a instancias superiores para que actuaran.
Otra prueba de que dicho sujeto miente, explicó es que asegura que los estudiantes fueron calcinados en un crematorio y después esparcidos por agentes en el basurero de Cocula y el Río San Juan, dado que hay pruebas científicas de que los restos presentan afectaciones térmicas diferenciadas, es decir, a diferentes temperaturas.
En este sentido la CNDH pidió en su momento que 114 de los restos hallados en estos puntos fueran estudiados por la Universidad de Innsbruck, y determinar si se trataba de estudiantes o de otras personas, lo cual de manera sospechosa tampoco se ha realizado.
Insistió en que «El Gil» y quienes hayan realizado estas filtraciones buscan el descrédito de las instancias que investigaron estos hechos en el pasado, y que sólo «dañan, contaminan y provocan efectos negativos en las investigaciones».
Iñaki Blanco, negó «categórica y enfáticamente» haber recibido sobornos de parte de la organización criminal Guerreros Unidos como señala el presunto testigo protegido, puesto que la Fiscalía a su cargo investigaba a este grupo desde tiempo antes, incluso intercambiaba información con instancias federales.
Recordó que a su llegada a Iguala la noche del 26 y madrugada del 27 se rescató y resguardó a 64 jóvenes, se logró la detención y consignación de 33 personas implicadas en el caso, la mayoría elementos de la Policía Municipal, así como al entonces presidente municipal, José Luis Abarca Velázquez.