*Acapulco, Chilpancingo e Iguala están en esa ruta, advierten
Texto y fotografía: Juan Blanco
Chilpancingo, Gro., 21 de marzo de 2021.- El presidente de la Asociación Civil «Grupo Chilpo», Adrián Alarcón Ríos advirtió que es en la zona de la Sierra y Tierra Caliente de Guerrero en donde los grupos criminales están controlando el proceso electoral e imponiendo a candidatos en las alcaldías e inclusive en el Congreso local con el respaldo de partidos políticos, y que Acapulco, Chilpancingo e Iguala estarían en esa ruta.
El pasado sábado 13 de marzo del presente año, autoridades eclesiásticas emitieron un comunicado en el que pidieron a los órganos electorales a estar vigilantes para evitar que los cárteles de la droga que operan en la entidad impongan a los contendientes y financien sus campañas o que presionen a los ciudadanos para orientar el voto hacia algunos de ellos.
A las autoridades civiles y militares les pidieron generar las condiciones de seguridad tanto para los candidatos como para la población, antes, en y después de la jornada electoral, y a no intervenir en la jurisdicción del Instituto Nacional Electoral (INE) y el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC).
Sin embargo, entrevistado al día siguiente, es decir, el domingo 14 de marzo, el obispo de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza advirtió sin precisar en cuáles que «ya hay municipios que se están dando a los narcotraficantes y yo no sé quién vaya a parar esto. Por eso los obispos de Guerrero estamos en contra de que el crimen organizado esté financiando las elecciones para el día de mañana saquen sus tajadas».
Al respecto, Alarcón Ríos pidió al gobierno estatal y federal y a los presidentes del IEPC e INE en Guerrero, Nazarin Vargas Armenta y Dagoberto Santos Trigo, a no tomarse a la ligera la información privilegiada con la que cuenta el prelado católico sino a actuar. «¡Aguas, Aguas! Con lo que está diciendo el obispo», alertó.
Dijo que como empresarios tienen conocimiento que son las alcaldías de la zona de la Tierra Caliente y de la Sierra en donde los grupos delictivos están presuntamente controlando el proceso electoral e imponiendo a candidatos «de dudosa reputación», inclusive, agregó, en el Congreso local.
«Nosotros tenemos informes ya de que algunos ‘malandrines’, algunos grupos criminales están acordando con partidos políticos para imponer candidatos», indicó, y advirtió que los municipios de Acapulco, Chilpancingo e Iguala estarían en esa ruta.
Desde hace varios años la Familia Michoacana y el Cártel Jalisco Nueva Generación llevan operando en gran parte de la zona de la Tierra Caliente y algunos municipios de la Norte, pero también en este último se encuentran «La Bandera», un remanente de Guerreros Unidos, y «Los Tlacos», quienes mantienen una confrontación específicamente en Iguala y otras demarcaciones vecinas por el control del trasiego de drogas, que ha dejado decenas de personas muertas, desaparecidas, lo que obligó a la Policía Estatal y Guardia Nacional a asumir recientemente la seguridad allí ante la nula respuesta de las autoridades locales.