Texto: Jesús Saavedra

Chilpancingo, Gro. 12 de abril de 2021.- El presidente, Andrés Manuel López Obrador anunció que la Comisión Especial para la Verdad y la Justicia en el Caso Ayotzinapa está indagando cómo fue que fusiles G-3 llegaron a manos de la policía de Iguala y fueron utilizados en los ataques a tiros que perpetraron esa noche en contra de los normalistas que realizaban una protesta la noche del 26 de septiembre del 2014.

López Obrador dijo lo anterior luego que le preguntaran la mañana de este lunes en la conferencia matutina sobre el tráfico de armas y de la resolución de un tribunal Alemán en contra de una empresa de armamento de ese país, que vendió fusiles G-3 a México y que una parte fueron enviados a Guerrero, cuando nuestra entidad está vetada de recibir ese tipo de armas por sus antecedentes en casos graves de violaciones de los derechos humanos.

El pasado 30 de marzo el Tribunal Superior Federal de Alemania (BGH) confirmó una sentencia contra la fábrica de armas Heckler & Koch (HK) por la exportación ilegal de fusiles de asalto a México, lo que obliga a la citada empresa a pagar una multa superior a los 3 millones de Euros y además dos empleados fueron sentenciados de manera condicionada de 17 a 22 meses de cárcel.

Entre 2006 y 2009 la empresa HK vendió casi 10 mil de sus fusiles G-3 a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), instancia que mandó más de 5 mil fusiles Guerrero, Jalisco, Chihuahua y Chiapas, a pesar que las autoridades alemanas explícitamente han excluido estos estados de poder tener acceso a ese armamento, pues consideran que existe el riesgo de violación a los derechos humanos.

En aquel tiempo el gobernador de Guerrero era Carlos Zeferino Torreblanca Galindo, quien avaló el envío de ese armamento a corporaciones públicas de Seguridad del estado y de los municipios.
El temor de las autoridades de Alemania y de la Unión Europea de que con ese armamento se cometieran graves violaciones a los derechos humanos, se hizo realiza la noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala cuando hubo 6 muertos, una veintena de heridos y 43 muchachos desaparecidos.

Las autoridades encontraron 38 fusiles G-3 en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad de Iguala y de acuerdo a la indagatoria por lo menos 7 fueron utilizados en los ataques a tiros que perpetraron en esos trágicos acontecimientos.

Al respecto, López Obrador dijo que en México están abiertas las investigaciones «en el caso de Ayotzinapa y en todos los casos; la fiscalía está tratando este asunto, existe una fiscalía especial para lo relacionado con Ayotzinapa y seguramente lo que estás planteando sobre la utilización de estas armas también lo están atendiendo».

López Obrador aseveró que en su administración no se va a tolerar el tráfico de armas, «es un ilícito, pero había tolerancia; eso ya no existe, ahora mismo se está actuando contra quienes se han involucrado en el tráfico de las armas».

Y anunció que en unos días se podría rendir un informe «completo sobre esto, porque se está actuando, investigando a quienes participan desde el gobierno en el tráfico de armas, eso se está haciendo, podemos informar a detalle en unos días más. Puedo también adelantarles que desde que la Secretaría de la Defensa tiene a su cargo el manejo de aduanas se han decomisado un número importante de armas, hay más control y se está combatiendo el contrabando de armas», añadió.

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