Texto y fotografía: Jesús Saavedra
Chilpancingo, Gro. 14 de julio de 2021.- Un grupo de derechohabientes de la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de esta capital, demandaron la renovación de contratos con instituciones privadas, que otorgan el servicio de hemodiálisis a un centenar de enfermos por insuficiencia renal crónica de la Montaña y Zona Centro de nuestra entidad.
Los familiares de los pacientes con problemas en los riñones, se manifestaron frente a las instalaciones del IMSS sobre la avenida Ignacio Ramírez, para pedir a las autoridades competentes la renovación de contratos por servicios subrogados.
Y denunciaron que en la clínica privada ARW Solutions, que está ubicada sobre el bulevar antes de llegar al CBTIS al sur de esta ciudad, les manifestaron que el jueves 15 de este mes se vence el contrato con el IMSS y a partir de esta fecha el tratamiento tiene un costo de mil 200 pesos por sesión.
Isabel Celso Villalba, familiar del paciente Felipe Hernández Carranza y Laura Gutiérrez señalaron que esta situación es de atención urgente debido a que atenta contra la vida de los derechohabientes del IMSS que requieren una diálisis cada tercer día o de lo contrario podrían morir.
Denunciaron que desde el lunes han solicitado la intervención de los directivos del nosocomio, sin embargo, no han obtenido respuesta, “la directora dice que la delegación de Acapulco es quien debe dar solución al problema”.
La clínica del IMSS en Chilpancingo, subroga alrededor de 98 a 100 pacientes provenientes de los municipios de Olinalá Chilapa. Mochitlán Quechultenango, Mezcala, Xochipala y Zumpango que requieren de diálisis cada tercer día para vivir.
Laura Gutiérrez explicó que ella es una de las pacientes que necesita el tratamiento de hemodiálisis, que consiste en un procedimiento que elimina los residuos en la sangre cuando los riñones ya no pueden hacer su trabajo, y ahora como jubilada sólo cuenta con su pensión y el seguro social para atención médica.
Los derechohabientes dijeron que buscarán una respuesta resolutiva por parte de las autoridades de la clínica o de lo contrario se verán en la necesidad de emprender acciones de protesta, “a las que no quisiéramos llegar”.