Texto: Juan Blanco
Chilpancingo, Gro., 18 de noviembre de 2021.- Por mayoría de votos, el magistrado Raymundo Casarrubias Vázquez fue designado como presidente del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura del Poder Judicial del Estado de Guerrero.
El magistrado estará al frente del órgano por el periodo comprendido del 1 de diciembre de este año al 30 de noviembre del 2024, dado que Alberto López Celis concluirá su mandato el 30 de este mes.
Al concederle la voz, Casarrubias Vázquez aseguró que este Poder será de «puertas abiertas» a la ciudadanía y que habrá una reingeniería y consolidación de todo el sistema penal acusatorio.
También aseguró que no habrá imposiciones, sino que todas las decisiones se tomarán siempre mediante consenso, y que habrá coordinación con la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y le planteará se incremente el presupuesto para que se logre dicha «transformación».
La sesión
Esta mañana, el Pleno del Poder Judicial realizó su sesión ordinaria en su edificio, en Chilpancingo, a la que acudieron 25 de los 26 magistrados.
Previo a la lectura del orden del día, la magistrada Indalecia Pacheco León solicitó se integrara a este un punto de acuerdo para que expusiera su Plan de Desarrollo Estratégico que contenía las políticas integrales de justicia igualitaria, transparente, con rendición de cuentas, calidad y expeditez para transformar el Poder Judicial del Estado de Guerrero, lo cual fue votado a favor.
Ya en desahogo de la sesión, los magistrados guardaron un minuto de silencio y rindieron igual tiempo de aplausos por el fallecimiento del magistrado Víctor Alejandro Arellano Justo, ocurrido el 7 de noviembre de este año.
Enseguida, se dio paso a la exposición del proyecto de la magistrada Pacheco León e indicó que el TSJ necesita recursos, capacitaciones y espacios de diálogos para que el acceso a la justicia se eficiente para poder cumplir con las recomendaciones de las sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y de las Alertas de Violencia de Género en la entidad.
Consideró que es urgente que el Poder Ejecutivo y el Legislativo «volteen a ver al Judicial» para que se defina su presupuesto con base a sus necesidades, sin atentar contra su autonomía. «Somos tres poderes de gobierno que estamos obligados a coordinarnos para sacar a Guerrero de la crisis de justicia que vive”.
Además, propuso mayor transparencia, perspectiva de género aplicada de manera obligatoria en todas las sentencias y una política de no tolerancia a la corrupción, desigualdad, discriminación y violación de los derechos humanos.
La ponencia del proyecto duró unos 15 minutos y la magistrada lo puso a consideración del TSJ para que se le de seguimiento y, en su caso, sea aprobado en las siguientes sesiones.
Participaciones y propuestas
Enseguida, se dio cuenta del punto que tenía que ver con la elección del nuevo o la nueva presidenta del Poder Judicial. Para ello, el magistrado Paulino Jaimes Bernardino solicitó al presidente Alberto López Celis se le concediera la palabra.
En su oportunidad, manifestó que la próxima o el próximo titular del TSJ debía «reunir ciertas cualidades, estar abierto al diálogo con todos los trabajadores de la impartición de justicia, debe atender urgentemente los problemas y retos del Poder Judicial».
Consideró que todo el sistema judicial, incluidos los magistrados, deben estar apegados a la sociedad para que tengan conocimiento del «papel que juegan, se debe exponer al pueblo nuestro trabajo».
Agregó que «tenemos un gran reto, que es consolidar el sistema acusatorio penal. No hay recurso suficiente, pero debemos optimizar nuestros recursos económicos y laborales; debemos establecer los juicios en línea, ante la pandemia».
Dijo que para él, el magistrado que podría darle marcha y consolidar al TSJ es Raymundo Casarrubias Vázquez, por lo tanto lo propuso como su candidato.
López Celis también le concedió la voz al magistrado Jesús Martínez Garnelo e indicó que «urge una reingeniería» de todo el Poder Judicial y manifestó que «quien nos encabece debe ser sensible, de brazos abiertos, formal, serio y propositivo».
Dijo que la próxima o el próximo presidente debe «incentivar a nuestra gobernadora (Evelyn Salgado Pineda) para que el sistema de justicia tenga autonomía presupuestal», es por ello que convocó a sus homólogos para que «hoy hagamos historia, bajo el principio de la democratización para transformar el sistema de justicia penal en Guerrero».
En ese sentido, al igual que Jaimes Bernardino, Martínez Garnelo propuso a Raymundo Casarrubias Vázquez como nuevo presidente del TSJ.
Lo secundó el magistrado Félix Nava Solis y señaló que «todos tienen la capacidad de presidir el Tribunal», pero que conoce la trayectoria jurisdiccional y política de Casarrubias Vázquez, por lo tanto «él reúne las cualidades para reestructurar el Tribunal Superior de Justicia».
La magistrada Indalecia Pacheco León también tuvo la oportunidad de hablar y se auto propuso como presidenta, bajo el argumento de que ella fue promovida por organizaciones sociales y por el pueblo.
También se le concedió la voz al magistrado Miguel Barrero Sedeño y aunque adelantó que no respaldaba ninguna propuesta, consideró «que en Guerrero es momento de las mujeres» y sustentó su argumento por el hecho de que el estado está siendo gobernado actualmente por una fémina.
Pero más allá de su opinión, dijo que quien resultara triunfador de esta elección, debe saber conducir el Poder Judicial, puesto que le esperarían «momentos muy difíciles» y que para enfrentarlos se necesitaría del apoyo de todos.
Votación
Finalmente, se vino la votación: 13 magistrados votaron a favor de su homólogo Casarrubias Vázquez y seis se abstuvieron. La magistrada Pacheco León, quien se auto propuso para ocupar la presidencia, recibió un solo voto: el suyo.
De esta manera y por mayoría de votos, Casarrubias Vázquez fue designado como presidente del TSJ por el periodo comprendido del 1 de diciembre de este año al 30 de noviembre del 2024, dado que Alberto López Celis concluirá su mandato el día 30 de este mes.
En asuntos generales, Casarrubias Vázquez agradeció el voto de confianza y el respaldo de sus compañeros para dirigir el Poder Judicial por los próximos cuatro años y ofreció retomar las propuestas de Indalecia y poner en marcha todo un trabajo de reingeniería en el TSJ y de consolidación del sistema penal acusatorio.
Aseguró que este Poder será de «puertas abiertas» a la ciudadanía y que no habrá imposiciones al interior del órgano, sino que todas las decisiones se tomarán siempre mediante consenso.
También dijo que habrá coordinación con la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, a quien le planteará, en el primer acercamiento que tenga con ella y con el Congreso local, se incremente el presupuesto al Poder Judicial para que sea posible su «transformación».
Casarrubias Vázquez tomará protesta como presidente el 1 de diciembre de este año en un acto público.