Texto: Jesús Saavedra
Chilpancingo, Gro., 21 de diciembre de 2021.- Habitantes del ejido Guajes de Ayala, del municipio de Coyuca de Catalán aseveraron que ante los constantes embates armados que han sufrido desde principios de año, no hay esperanza que el gobierno federal, estatal o municipal puedan intervenir en esta grave problemática en la Sierra de la Tierra Caliente y que en esa zona «claramente no se pueden dar abrazos cuando vienen balazos».
Este martes a nombre de los habitantes de ese ejido, emitieron un comunicado de los hechos que sucedieron el pasado domingo, cuando afirman que fueron víctimas de una emboscada cuando trasladaban para su atención a una mujer embarazada.
Y afirmaron que eso originó un enfrentamiento armado en inmediaciones de los lugares conocidos como El Río y El Otate después del mediodía del domingo y que se prolongó hasta el anochecer «debido a la falta de doctor y medicinas se planeó trasladar por ese camino a una persona delicada de salud lo cual terminó en balacera».
Afirmaron que quienes los emboscaron fue el grupo que lidera Miguel Ávila Chávez y Bertín Gómez Chávez, alias «El Chino», quien sostienen son lugartenientes de Víctor Espino Cortés alias «El Aguacatero» y de Chano Arriola, a quienes identifican como brazo armado de la Familia Michoacana (FM), quienes fueron alertados con anterioridad para emboscarles «teniendo el tiempo suficiente para organizarse y planear el ataque, el cual gracias al movimiento coordinado que se tuvo que hacer antes del traslado se pudo repeler y frustrar el plan y avance de parte de este grupo armado proveniente del Durazno y el crucero del Aguacate en la sierra de coyuca de Catalán Guerrero».
Informaron que de esta emboscada no hubo heridos o muertes y que en represalia, los integrantes del grupo agresor incendiaron una vivienda abandonada.
Luego de esos hechos, recordaron en el escrito que el 28 de noviembre el secretario de Gobierno, Saul López Sollano visitó la comunidad de Las Mesas del Parotal en la Sierra de la Costa Grande, «donde le recibió, Víctor Espino Cortés ‘El Aguacatero’, participando también en dicha reunión Ignacio Chávez Arriola ex representante de la extinta UPOEG, en esa región quien se pronunció estar cansado de la violencia que opera en la zona presentándose como un hombre de trabajo y no como parte de un grupo delincuencial que opera en la zona serrana quien secuestró y asesinó al becario del programa Federal sembrando vida, Gilberto Tapia Mendoza el cual después de secuestrarlo en la localidad del Durazno apareció muerto en La Barrita, cerca de Petatlán el pasado 16 de julio del presente año, haciendo alusión hacia su persona de ser parte del grupo opositor de Guajes de Ayala e integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG)».
Aseveraron que ese grupo de la FM, ‘son señalados e identificados de secuestro y desaparición del presidente del consejo de vigilancia del Comisariado Ejidal de Guajes de Ayala, Elías Gayegos Coria y su hijo Fredy Gayegos García el pasado 16 de octubre del 2020 quienes hasta la fecha están desaparecidos, así como del trasiego y robo de madera en rollo al núcleo agrario de Guajes de Ayala en marzo y abril del mismo año por lo cual de esa fecha en adelante ha generado una ola de violencia e intentos de tomar el control del territorio provocando pérdidas humanas y más de mil personas desplazadas por la inseguridad».
Recordaron que ha habido agresiones enfrentamientos desde el 25 de febrero del 2020 y hasta el pasado domingo, «lamentablemente la delincuencia en el estado no se va terminar con la llegada del nuevo Gobierno del estado, esto para quienes tenían o tienen y estaban cansados de las irregularidades, muertos y desaparecidos que dejó el Astudillato, Gobierno que estuvo plagado de irregularidades y complicidad con todos los grupos de la delincuencia que operan en el Estado los cuales han tenido y tienen la complicidad de muchos presidentes municipales para estar robando al erario público, ministerios públicos de las diferentes entidades y fiscales de las diferentes regiones del estado».
Afirmaron que a pesar de la situación económica que ha generado la pandemia, «hoy fecha es muy fácil obtener cualquier tipo de arma en el Estado, lamentablemente de un 100 por ciento del total de las armas que hay en todo el estado y el país el 75 por ciento están en las manos equivocadas de civiles armados; mientras todo Guerrero está sufriendo los resultados de todo esto, por la incompetencia de muchos que el dinero les ha comprado favores desde hace muchos que el dinero les ha comprado favores desde hace muchos años ya.
En Guerrero no es fácil el reto que ha tomado la actual administración, pero sí tienen las ganas de ver un Guerrero diferente pueden lograrlo; los mejores decesos es que a Guerrero y a su pueblo le vaya mejor, que en la Sierra pueda saldarse la deuda histórica que a existido desde siempre, la deuda de justicia social, para que la sierra pueda desarrollar todo su potencial el cual es mucho y uno de sus más grandes obstáculos es la tala clandestina en complacencia y contubernio de funcionarios y representantes de las dependencias federales de protección al medio ambiente».
Y finalizaron diciendo que solo les queda defenderse, «claramente no se pueden dar abrazos, cuando vienen balazos».