Texto y fotografías: Bernardo Torres Morales
Ayahualtempa, Gro., 06 de enero de 2021.- Comunidades indígenas de Ayahualtempa, Amatitlán, El Caracol y Los Pinos del Municipio de José Joaquín de Herrera marcharon para emplazar a los Gobiernos Estatal y Federal a que brinde seguridad, de lo contrario se verán obligados a tomar las armas, hombres, mujeres y niños.
Alrededor de 500 adultos y niños cambiaron la mañana de este 06 de enero el Día de Reyes por un día de protesta, ante la ola de violencia que los mantiene secuestrados desde hace más de dos años por un grupo criminal que opera en la zona.
Concentrados en la explanada de la Comisaría Municipal de Ayahualtempa, cerca de las 11:00 de la mañana salieron en marcha hacia el módulo que tienen elementos de la Policía Estatal y Municipal en la entrada a la comunidad.
Durante la movilización que fue seguida por el grupo de policías comunitarios reprocharon la complicidad de la Policía Municipal de José Joaquín de Herrera con la delincuencia organizada y exigieron su salida.
Pidieron que la comunidad sea resguardada por elementos del Ejército Mexicano o de la Guardia Nacional y establezcan campamentos en los cruceros de las comunidades de Tlachimaltepec y Los Postes que quedan de camino a la cabecera municipal, Hueycantenango.
Denunciaron que en los últimos años 10 personas de esta localidad han sido asesinadas en ese trayecto carretero, y el pasado 11 de diciembre un joven fue levantado y hasta la fecha se desconoce su paradero.
Hasta ahora, dijeron que la presidenta municipal, Orquídea Hernández Mendoza ha sido omisa para atender el tema de seguridad y la demanda social de sus comunidades.
Por eso llamaron al gobierno estatal encabezado por Evelyn Salgado Pineda y al federal, que encabeza Andrés Manuel López Obrador tomen en sus manos el tema de la seguridad en esta zona, donde los criminales operan con total impunidad.
Las localidades, a causa de la violencia sufren una severa crisis económica al no poder desarrollar sus actividades libremente, no pueden llevar a vender sus productos, ni tampoco pueden abastecerse en la cabecera municipal.
Carecen de un centro de Salud para atender a los enfermos a quienes trasladan con mucha dificultad, las escuelas llevan varios meses cerradas porque los maestros tienen miedo de acudir.
Al final de la marcha, advirtieron que de no ver una actuación contundente por parte de las autoridades estatales y federales en un plazo de ocho días no tendrán más opción que tomar las armas hombres, mujeres y niños para defenderse.