Texto: Juan Blanco
Fotografía: Archivo
Chilpancingo, Gro., 26 de septiembre de 2022. – El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández consideró que los militares que supuestamente estuvieron involucrados en la desaparición de los 43 de Ayotzinapa, deben pedir perdón a las madres y padres de los jóvenes, pero a la vez manifestó que éstos no deben condenarlos eternamente, de modo que también deben pedirles perdón.
Este lunes 26 de septiembre, se cumplen ocho años del caso Iguala que dejó seis muertos, entre ellos tres civiles y tres normalistas, y 43 desaparecidos. Estos hechos dieron la vuelta al mundo y provocaron indignación entre la sociedad.
Desde entonces no se conoce el paradero de las víctimas a pesar de que el presidente Andrés Manuel López Obrador prometió resolver el caso en el primer año de su gobierno, de modo que los familiares mantienen su movimiento con el apoyo de organizaciones sociales y del normalismo del país.
Como se recordará, hace más de un mes el presidente de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa, Alejandro Encinas Rodríguez dio a conocer un informe en el que reconoció que «no hay indicio alguno» de que sigan con vida los 43.
También dijo que la desaparición fue un «crimen de Estado» en el que «concurrieron integrantes del grupo delictivo Guerreros Unidos y agentes de diversas instituciones del Estado mexicano».
Precisó que, de acuerdo con el informe, efectivos del Ejército Mexicano tuvieron parte de la responsabilidad: «Sus acciones, omisiones o participación permitieron la desaparición y ejecución de los estudiantes, así como el homicidio de otras seis personas».
Agregó: «No se acreditó una acción de carácter institucional, pero sí responsabilidades claras de elementos» de las secretarías de la Defensa Nacional y la Marina Armada de México, destacados en la zona al momento de los hechos.
De acuerdo con los propios familiares, se les informó que hay 83 nuevas órdenes de aprehensión, de las cuales 20 son contra militares. En ese sentido, de estas últimas recientemente se cumplimentaron tres de ellas.
Entre los detenidos y que se le dictó auto de formal prisión recientemente, se encuentra el general de Brigadier José Rodríguez Pérez, quien era comandante del 27 Batallón de Infantería de Iguala cuando desaparecieron los 43.
Entrevistado brevemente este domingo luego de oficiar la misa de la 1:00 de la tarde en la catedral de Chilapa, el obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández consideró que lo que debe permear en el caso es el perdón tanto por quienes cometieron el hecho como por las víctimas.
«Es probable, y puede pasar, que sí se les pase la mano a los soldados, y es probable que cometan muchos errores, y no hay otra que ellos pidieran perdón y también los papás perdonaran a los que mataron a sus hijos, pero que no vuelva a pasar: ni los militares vuelvan a cometer un error de estos y tampoco los padres los condenen para siempre», manifestó.
Y es que señaló que «no sabemos si los militares obraron por cuenta propia o si alguien los mandó. Entonces, ellos son obedientes, pero no vayan a ser obedientes para matar hermanos de entre hermanos», dijo.