Texto: Juan Blanco / Jesús Saavedra
Fotografía: Juan Blanco
Chilpancingo, Gro., 26 de octubre de 2022. – Trabajadores de la Fiscalía General del Estado (FGE), adheridos algunos al Sindicato de Trabajadores Burócratas y Servidores Públicos del Estado de Guerrero (STBSPEG), se manifestaron contra la supuesta militarización de la institución.
Alrededor de las 7:30 de la mañana, unos 40 manifestantes se apostaron en el sentido de sur a norte del bulevar René Juárez Cisneros, en donde demandaron a las autoridades estatales atención a sus demandas.
Entrevistada en el lugar, la secretaria general del STBSPEG, Nayeli Hernández dijo que desde que la teniente del Ejército Mexicano, Sandra Luz Valdovinos Salmerón, asumió el cargo de fiscal, muchos militares de Guadalajara y Coahuila han llegado a Guerrero para ocupar espacios en las direcciones, jefaturas, vicefiscalías.
La propia Hernández Neri fue despedida de su trabajo en la FGE y reinstalada en sus funciones por una decisión judicial, por lo que este miércoles señaló que sus compañeros “están cansados de las amenazas dentro de la FGE.
Dijo que lo anterior ha provocado el desplazamiento de varios empleados de sus centros de trabajo, pero también el despido de por lo menos 300 trabajadores más de todas las áreas. «Aquí hay tantos guerrerenses que necesitan laborar, que necesitan un trabajo y se les está quitando esa oportunidad».
Ante ello, dijo que están pidiendo la salida de los elementos castrenses, puesto que la dependencia de justicia es más militar que civil.
Agregó que otros de los problemas que enfrentan es que los están forzando a salir a comisiones en las siete regiones de la entidad, sin siquiera ser operativos, sin contar con un oficio de comisión ni seguro de vida desde el 2019.
Además, no les han incrementado su salario ni su bono de riesgo mensual, de modo que a los administrativos les están dando 2 mil pesos y a los operativos 5 mil 500, por lo que piden la nivelación.
Dijo que en enero la fiscal sostuvo una reunión con todos los trabajadores a quienes les prometió resolver el tema en seis meses, pero que ya pasaron y no han tenido una respuesta.
Denunció que hace un mes aproximadamente hubo un decomiso de 10 millones de pesos en Acapulco y que el dinero se resguardo en la agencia del Ministerio Público de Costa Azul, de donde desapareció y que ahora se pretende involucrar a dos trabajadoras administrativas de Chilpancingo.
Sostuvo que se trató de “un robo en Acapulco, ahora despidieron a las compañeras en Chilpancingo, son trabajadoras administrativas y las están involucrando, manchando su nombre”.
Abundó que hace unos días a las trabajadoras (de las que no dio sus nombres) se les citó en la oficina de la Particular de la Fiscal, donde las mantuvieron incomunicadas y solo les informaron que estaban siendo despedidas, sin informarles por qué.
Que en estos días tuvieron conocimiento de “un oficio donde se les involucraba en el robo de esos 10 millones en Costa Azul, pero no hay ninguna carpeta de investigación, esta FGE no está al alcance de los ciudadanos, están al alcalde de violar los derechos humanos”.
Aseveró que “es muy delicada la situación que se vive al interior de la FGE, por eso estamos exigiendo la destitución de la Fiscal, Sandra Luz Valdovinos Salmerón y todo su equipo de trabajo, se vinieron a despachar con la cuchara grande, exigimos una auditoría a los recursos públicos que manejan, llegan militares que están ganando salarios elevados, están ganando más que un trabajador que tienen años trabajando en esta Fiscalía”.
Añadió que no se van a retirar de la protesta hasta que haya una respuesta a su exigencia del cese en el cargo de la teniente coronel, Sandra Luz Valdovinos Salmerón.