Texto: Juan Blanco
Chilpancingo, Gro., 01 de noviembre de 2022. – Los tres hombres que se encontraban desaparecidos en Quechultenango desde el pasado viernes 28 de octubre, fueron encontrados sin vida en un barranco de ese municipio de la región Centro de la entidad suriana.
Se trata del encargado de despacho de la Dirección de Recursos Humanos de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero, Adolfo Aparicio Bello, y de los dos trabajadores de éste, los señores Pedro Romero Sotelo y Efrén Barrios Cárdenas.
La información que se tiene es de que ayer fue localizada al fondo de un barranco, ubicado en el tramo carretero Santa Cruz-Pueblo Viejo, a la altura del punto conocido como El Campanario, la camioneta donde presuntamente se desplazaban con dirección a la capital los tres.
Al interior de la unidad, señala la información de una fuente, fueron hallados dos cadáveres alrededor de las 15:00 horas de este lunes, en tanto que el tercero fue localizado 300 metros más abajo del automóvil este martes.
Como se recordará, ayer familiares de los tres hombres bloquearon por casi cuatro los carriles de norte a sur de la Autopista del Sol, a la altura del punto conocido como el Parador del Marqués, al sur de esta capital.
Dijeron que habían viajado a Quechultenango a realizar un trabajo personal al poblado de San Martín, pero que a su regreso perdieron contacto con ellos, pero tras casi cuatro días de búsqueda fueron encontrados muertos, pero se desconoce si fue producto de un accidente o los asesinaron.
Sin embargo, en el caso de Pedro Romero Sotelo, se sabe que es uno de tantos habitantes desplazados de la comunidad serrana de Campo de Aviación, municipio de Leonardo Bravo, por la violencia en noviembre del 2018 provocada presuntamente por el grupo delictivo Los Tlacos, que opera en Heliodoro Castillo, y quien mantiene una disputa por el control de Chilpancingo con «Los Ardillos», quien opera en Quechultenango.