ATRÁS DE LA RAYA
Por: Heliodoro Cerros Flores
Chilpancingo, Gro., 07 de noviembre de 2022.- Una gran controversia a nivel nacional ha generado la propuesta de reforma del sistema electoral en México impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que tiene como objetivo sustituir o eliminar al Instituto Nacional Electoral (INE), bajo el argumento de reducir los costos económicos y terminar con los fraudes en estos procesos cívicos.
La reforma electoral se ha convertido en un asunto de estado por la participación abierta y directa de los funcionarios del Poder Ejecutivo federal, de los gobiernos estatales y municipales y los miembros del Poder Legislativo que representan al partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
En la promoción de la iniciativa de reforma electoral, se han utilizado todo tipo de recursos para lograr que se apruebe antes del primero de diciembre próximo, sobre todo en el terreno partidario y legislativo para alcanzar el apoyo y la aceptación de los diputados federales de los partidos de oposición.
Aquí, se destaca que la reforma electoral que impulsa el presidente López Obrador, por ser de orden constitucional, requiere el apoyo de dos terceras partes del pleno de la Cámara de Diputados a nivel federal y Morena y sus aliados no cuentan con los votos legislativos suficientes para aprobarla.
Por lo anterior, el gobierno de la 4T está utilizando todos los recursos para convencer y lograr el apoyo del PRI y sus diputados federales, encabezados por Alejandro Moreno Cárdenas y Rubén Moreira Valdés, como ya lo lograron con la incorporación de la Guardia Nacional (GN) a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA).
Para lograr la incorporación de la Guardia Nacional a la SEDENA, se asegura que el dirigente del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, concedió su apoyo para que los diputados federales y los senadores del partido tricolor votaran a favor para evitar que se concretaran una serie de amenazas que se habían enderezado en su contra.
De la reforma electoral, el dirigente del partido Movimiento Ciudadano (MC), Dante Delgado, ha asegurado que los dirigentes y los legisladores federales del PRI ya han alcanzado un acuerdo con el gobierno de la 4T y Morena para aprobar la iniciativa del presidente López Obrador.
A su vez, el secretario de Gobernación (SEGOB), Adán Augusto López Hernández, aseguró que se está construyendo una reforma electoral con un grupo de trabajo en el que participan legisladores del PRI y “algunos” del Partido Acción Nacional (PAN).
Por lo anterior, los legisladores del PRI en la Cámara de Diputados, encabezados por Rubén Moreira Valdés, salieron a confrontar los dichos del dirigente de MC, Dante Delgado, y del secretario de gobernación, Adán Augusto López Hernández, rechazando que tengan un pacto con el gobierno de la 4T de López Obrador o con Morena para sacar adelante la reforma electoral.
Lo real, es que no será hasta cuando entre a trámite legislativo la reforma electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador, para su discusión y aprobación, en su caso, cuando se conozca con claridad la posición que asumirán los diputados y los senadores del partido tricolor.
En esta dinámica, desde que dio a conocer y presentó su reforma electoral al Congreso de las Unión, el presidente López Obrador ha sido severamente cuestionado por representantes de diversos sectores de la sociedad, analistas y conocedores de los temas electorales, quienes han señalado que lo que realmente se busca con esa iniciativa es regresar a épocas pasadas cuando el gobierno organizaba los procesos electorales a partir del año 1946 hasta que se creó el Instituto Federal Electoral (IFE) en 1990.
El Instituto Nacional Electoral (INE), que suplió al IFE, es uno de los órganos constitucionales autónomos de México con funciones de máxima autoridad electoral, se encarga de celebrar y regular los procesos electorales y establecer las directrices a las que se sujetan quienes participan en dichos comicios.
Aquí, se debe recordar que el presidente López Obrador mantiene una rivalidad u odio acendrado contra el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, porque no se ha plegado a sus posiciones desde la pasada jornada electoral en la que resultó electo el actual titular del Poder Ejecutivo Federal.
Y de acuerdo al contenido que se ha dado a conocer de la iniciativa de reforma electoral, el presidente López Obrador busca aplicar su política de austeridad al INE o al organismo que lo sustituya, para lo cual, en el presupuesto de egresos del año 2023 ya se le redujeron más de cuatro mil millones de pesos; busca que los consejeros y los magistrados electorales sean electos mediante una especie de consulta popular y que desaparezcan los organismo electorales locales de las diferentes entidades federativas del país.
En ese sentido, la iniciativa de reforma electoral, como lo señalamos al principio del texto, ha generado una gran controversia y severas críticas al presidente López Obrador porque, se asegura, que lo único que busca es concentrar el poder y garantizar la continuidad de su gobierno aplastando al sistema electoral mexicano y al órgano autónomo que ha sido protagonista de la sucesión partidaria en la presidencia de la República desde el año 2000.
Aquí, es de sobra conocido que el presidente López Obrador no descansará hasta lograr que su iniciativa de reforma electoral sea aprobada pésele a quien le pese, que tomará todas las medidas que sean necesarias para derrumbar al actual sistema electoral mexicano como ya lo hizo con el sistema institucional.
Y las críticas y lo señalamientos, como los que hace la jerarquía católica de México en su suplemento “Desde la Fe”, en donde reconocen que el INE es “una de las instituciones más confiable para los mexicanos y es preocupante la iniciativa de reforma electoral presentada por el presidente Andrés Manuel López Obrador en la que se plantea la eliminación de dicho instituto”, a López Obrador le salen sobrando.
“La esencia de esta institución –el INE- está en la superación del antiguo esquema donde el gobierno en turno era juez y parte en los comicios electorales, para dar paso a una institución ciudadana que favorece la participación y organización más amplia y plural en el contexto de opciones políticas”, asentaron…Veremos.