A través de un comunicado el obispo emérito señala perdonar a quienes «me han hecho daño» y de igual manera «a aquéllos que me han revictimizado producto de la desinformación»
Texto Bernardo Torres Morales
Chilpancingo, 8 de mayo de 2024.- A casi dos semanas de la presunta privación de la libertad del obispo emérito de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza,, dio a conocer que no emprenderá acciones legales por la campaña de desprestigio y desinformación.
A través de un comunicado el líder religioso se dirigió a la feligresía, a los medios de comunicación y sociedad en general para aclarar la situación.
Indicó que «después de haber hecho oración, meditado profundamente y de haber consultado con mis seres queridos, tanto del clero como laicos y en razón de que lamentablemente mi vida, edad y mi salud están en condiciones desfavorables, siguiendo los principios evangélicos de nuestro Señor Jesucristo, que perdonó a las personas que lo traicionaron, lo vendieron, lo juzgaron, lo torturaron y lo asesinaron, con todo mi corazón perdono a todas las personas que me han hecho daño por los hechos de los que he sido víctima, así como a aquéllos que me han revictimizado producto de la desinformación».
Rangel Mendoza adelantó que en ejercicio de sus derechos constitucionales, no presentará ninguna denuncia contra las personas le han hecho mal.
También pidió a los medios de comunicación comprendan y respeten su decisión encaminada al bien de su seguridad e integridad física y moral.
«Agradezco infinitamente a todas las autoridades, tanto legales como eclesiásticas, que han colaborado en este caso, y de manera muy especial al Mtro. Luis Gasca, quien ha sido mi abogado» dijo.
Finalmente agradeció a todas las personas que se han solidarizado con él y a quienes hicieron oraciones para su recuperación. (Fotografía archivo)