Texto y fotos Luis Daniel Nava
Chilpancingo, 18 de julio de 2024.- La certificación de marcas de mezcal solo está ayudando a los comercializadores o intermediario, pero no al verdadero productor que no cuenta con apoyo real en la cadena maguey-mezcal.
El investigador guerrerense Eduardo Sánchez Jiménez, del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt) y el dirigente de la Asociación de Magueyeros y Mezcaleros del Chilapan, Emiliano Cerros Nava, fueron consultados respecto a las declaraciones que dio el lunes pasado en Acapulco la titular de la Secretaría de Desarrollo y Fomento Económico, Teodora Vega Ramírez.
La funcionaria aseguró que sólo el 10 por ciento del mezcal este certificado y que existe desinterés de los productores por obtener la certificación de su bebida. Aseveró también que se destinan 3.5 millones de pesos para el sector.
El investigador Sánchez Jiménez afirmó que no es el 10 por ciento del mezcal que se produce en la entidad el que se certifica sino del 3 al 5 por ciento, pero que la mayoría de esas marcas certificadas solo ayudan al comercializador y no a productores como los de Patlacala, uno de los lugares remotos donde se elabora mezcal de calidad.
“La certificación sólo ayuda al comercializador; el productor no está relacionado a la cadena de distribución”.
Dijo que si en realidad el gobierno de Guerrero tiene ganas de apoyar al sector mezcalero, debería de empezar por integrar a los productores o maestros mezcaleros a la cadena de valor.
Los 3.5 millones que aporta al año es nada para el impulso que necesita el producto; desde la reforestación, destilación y la venta, pero de los verdaderos productores, dijo el académico.
Sánchez Jiménez ha estudiado desde 2017 la producción de mezcal en la región Centro y Tierra Caliente.
El investigador también declaró del padrón de 120 empresas certificadas de mezcal en Guerrero, 80 pertenecen a comercializadores o empresas intermediarias que se dedican a comprar el mezcal y etiquetarlo, pero que no lo producen. Es decir, el 66 por ciento de las marcas certificadas revenden el mezcal.
El investigador Eduardo Sánchez considera que apenas el 3 por ciento de la producción se certifica.
“La certificación ayuda al comercializador, pero no al productor”, reitera. Ejemplificó con el caso de los maestros mezcaleros de Petlacala, en la sierra de San Miguel Totolapan.
“En Petlacala los productores no están relacionados con las cadenas de comercialización. En el caso de Guerrero no funciona como lo dice la funcionaria. Acá los productores están en una situación difícil y alejada de que sus productos los pongan ellos mismos en los anaqueles de grandes tiendas”, reseña.
Propuso que unas de las medidas que el gobierno puede impulsar para mitigar la violencia en las zonas mezcaleras es que incentive los eslabones de la cadena maguey–mezcal.
“Que los productores puedan ser dueños de la marca y comercializarla. Hay plantas, unidades de transformación, a eso le debe de pegar, a la integración de los maestros a las cadenas de valor y no la certificación. 3.5 millones de pesos no es nada”.
No hay apoyo real para el productor
Cerros Nava, de la Asociación de Mezcaleros y Magueyeros del Chilapan, dijo que el gobierno del estado sólo está impulsando la certificación del mezcal pero que no hay un apoyo real al productor y en garantizar que se vaya a vender.
“El productor no quiere certificar y tenerlo guardado por que requiere de los recursos ayudarse en su trabajo”, afirma.
El magueyero y mezcalero consideró que los 3.5 millones de presupuesto no son suficientes. Es un recurso mínimo para la necesidad que existe. Y para realmente impulsar la cadena maguey-mezcal como nosotros la concebimos en la Montaña Baja, dijo.
“Tengo entendido que en 2022 y 2023 fueron más las propuestas de los mismos productores y no todos lograron certificar su fábrica”.
Pero no solo es la certificación de la fábrica, sino que se requiere de más recursos primero certificar las plantaciones, en seguida la fábrica y posterior certificar los lotes del mezcal.
“Ahí (la funcionaria) habla solo de la certificación del mezcal, pero esto lleva más acciones que tendrían que apoyarse si no al 100 por ciento si una parte”.
Emiliano Cerros con otro productor, Faustino Castro (a su derecha) en la cata.
Cerros Nava dijo que una parte fundamental es la reforestación. “Tampoco se puede hablar de producción y comercialización porque si no que va a pasar en unos cuantos años cuando ya no haya materia prima”, recalcó.
También criticó que las empresas que tienen marcas o gente que pretende crear una marca acaparan el mezcal.
Por la falta de apoyo del gobierno, los productores venden su mezcal al primer cliente que les llega.
“Desde luego que si, se acercan empresas que ya tienen marcas o que está pretendiendo crear una marca. Y si no hay apoyo por parte del gobierno, desafortunadamente el productor vende el mezcal al primer cliente que llegue y que acuerden el precio”.
“Ahí quienes se llevan la mayor parte del recurso ya en la venta al público es el comercializador y los productores siguen en la misma situación, haciendo el trabajo.
“Pero no teniendo las ganancias que debieran tener ya con todo el proceso de comercializador que pudieran hacer ellos”.
Recordó que al inició del gobierno de Evelyn Salgado hubo una propuesta de que habría mucha promoción para el mezcal, pero hasta la fecha no ha habido nada.
“El año antepasado se hizo el evento en Acapulco donde se dio el espacio para muchos productores, pero se ha dejado de hacer, apenas se habla que posiblemente se haga en Zihuatanejo, pero luego hay restricción, no es abierto para todos si es que no está certificado el mezcal”, finalizó.