Texto: Bernardo Torres
Fotografía: Internet
Chilapa, Gro., 25 de julio de 2019.- Miembros de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias de los Pueblos Fundadores (CRAC-PF), denunciaron que no han cesado los ataques armados en contra de la comunidad indígena de Tula, en el municipio de Chilapa, presuntamente por el grupo delincuencial “Los Ardillos”.
Vía telefónica, Bernardino Sánchez Luna, coordinador de esta organización, señaló que van al menos cuatro ataques e intentos por irrumpir en la comunidad, y el último se registró la tarde de este miércoles, ante la ausencia total de seguridad por parte de los Gobiernos, Municipal, Estatal y Federal, quienes hasta ahora niegan los hechos.
Dijo, que además hay la amenaza de que la tarde de este jueves ingresarán a la comunidad de Ayahualtempa, donde también tiene presencia la policía comunitaria, amenaza de la cual ya dieron aviso a las autoridades, por lo que los hacen responsables de cualquier pérdida de vidas o personas que resulten heridas.
Por si fuera poco, al sitio del grupo criminal, también persiste el hostigamiento y el acoso de los elementos del Ejército Mexicano que se encuentran en el retén de “Los Ajos” en la entrada de Chilapa, donde cada vez que pasan, amenazan con desarmarlos, lo cual los dejaría aún más vulnerables.
“Ayer incluso intentaron desarmar a dos compañeros de Xicotlán, que porque no llevaban su playera, llevaba una 22 que le querían quitar”, dijo.
Luego de las agresiones armadas a Rincón de Chautla, el Fiscal General del Estado, Jorge Zuriel de los Santos, se había comprometido a regresar y a girar las órdenes de aprehensión en contra de los responsables, pero ni una cosa ni otra se ha hecho.
Sánchez Luna, exigió al Gobierno del Estado se cumplan los 15 puntos asentados en una minuta, en las que se incluyen denuncias contra os presuntos agresores, proyectos productivos y despensas a familiares de las víctimas, y a quienes no pueden salir de sus pueblos para adquirir víveres.
En algunas comunidades, expuso, los pobladores ni siquiera pueden salir a sus tierras de labor, porque pueden sufrir algún atentado, lo cual ya ha pasado con anterioridad, y ninguna autoridad ha intervenida, y ahora sólo esperan que pudiera intervenir la Guardia Nacional.
Urgieron una intervención inmediata, porque la situación económica y alimentaria se está agudizando, y de continuar la omisión gubernamental, no tendrán más recurso que armarse y hacer frente ha dicho grupo criminal.