Texto: Juan Blanco
Chilpancingo, Gro., 22 de noviembre de 2020. – Pese a los contagios y vidas que ha dejado el Covid-19 en la comunidad católica de Guerrero, la Iglesia de San Mateo, ubicada en el barrio del mismo nombre, en esta ciudad, lució aglomerada de feligreses durante la misa dominical de las 11:00 de la mañana de este 22 de noviembre.
En un recorrido que este medio de comunicación realizó por ese templo religioso, se observaron a unas 100 personas, entre infantes y adultos mayores, participar en la «celebración eucarística».
Había tantos, que el espacio de afuera fueron colocadas sillas de plástico para que los asistentes se sentaran, en tanto que, algunos otros, hasta de pie estaban.
Los feligreses portaron cubrebocas, pero no respetaron la «Sana Distancia» de 1.5 metros que las autoridades sanitarias piden guardar para evitar contacto corporal y con ello posibles contagios de la actual enfermedad viral.
A las autoridades religiosas no se les vio aplicar gel antibacterial previo al ingreso a la iglesia de las personas y no se les tomó la temperatura corporal. Los tapetes sanitizantes de calzado que colocaron en los accesos lucieron secos.
Lo anterior se da en medio de los más de tres sacerdotes muertos y alrededor de 10 contagiados que ha dejado el Covid-19 en la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, incluida su máxima autoridad, el obispo Salvador Rangel Mendoza, quien luego de recuperarse reapareció oficiando la misa de la 1:00 de la tarde del domingo pasado en la catedral de Chilapa.
El último informe del titular de la Secretaría de Salud estatal, Carlos de la Peña Pintos, indica que Guerrero acumula 23 mil 266 casos positivos y 2 mil 434 decesos por Coronavirus.