Texto: Avigaí Silva

Edición de vídeo: Alberto Gomez

Chilpancingo, Gro., 11 de septiembre de 2019.- Kenia Hernández, integrante del Colectivo «Zapata Vive», denunció que recibió amenazas «de muerte» de integrantes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), motivo por el que decidió salir esta tarde-noche de Xochistlahuaca, en la región de la Costa Chica.

En un comunicado se informó que durante la mañana de este miércoles la UPOEG detuvo «por una deuda particular» a  Edgar Rommel Estrada Gutiérrez, integrante del Colectivo «Zapata Vive», quién horas después fue rescatado por sus compañeros y miembros de organizaciones sociales, esto detonó en amenazas de muerte hacia Kenia, por parte de la autodenominada Policía Comunitaria.

«Queremos denunciar también las amenazas proferidas por elementos de la UPOEG. Aunque argumentaron públicamente que la detención de Edgar se debía a una deuda particular, cuando lo tenían encerrado le mostraron una foto y le dijeron: ya sabemos que andas con Kenia, queremos a tu dirigente aquí, que ella venga por ti», se informó a través de un comunicado.

En el boletín también se dio a conocer que Bruno Plácido, dirigente de la UPOEG ofreció dinero por la cabeza de Kenia Hernández y Valentín Hernández, ambos integrantes del Colectivo Zapata Vive.

«Sabemos que son represalias por la defensa del territorio y la libertad de presos políticos de Guerrero que los compañeros han dado, y estamos con ellos. Trataremos de no andar solos, pero si algo pasara, responsabilizamos a la UPOEG, a su líder máximo en el estado, y al gobernador del estado por permitir su actuar fuera de todo marco de la ley y en flagrantes violaciones a derechos humanos todos los días» se lee en un comunicado que se ha distribuido a los diferentes medios de comunicación.

Horas más tarde, se informó que Kenia había abandonado Xochistlahuaca por la advertencia de que la UPOEG ingresaría por la noche al municipio para ir por ella.

«Camaradas. En estos momentos estoy saliendo fuera de mi comunidad, pues me están alertando de que la UPOEG quiere incursionar acá por la noche para agarrarme, aunque de ninguna manera es su territorio y jamás han celebrado una sola asamblea aquí, pero es así como ellos se conducen, fuera de toda asamblea, uso o costumbre indígena, y por denunciar esto es que le han puesto precio a mi cabeza. En pie de lucha compas», fue el mensaje que emitieron para informar sobre este último hecho.

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