Texto: Jesús Saavedra
Chilpancingo, Gro., 13 de agosto de 2021.- El presidente, Andrés Manuel López Obrador aseveró que se va a tener un diálogo con el magisterio disidente para convencerlos que se sumen a la iniciativa del regreso a clases presenciales en un par de semanas y señaló que no será obligatoria esa decisión para padres y trabajadores del magisterio, además que se va a mantener el programa de Educación a Distancia.
Por segundo día consecutivo, López Obrador insistió que se va a regresar a clases presenciales, justificando que los estudiantes han padecido problemas en esta pandemia por el aislamiento, a pesar que este jueves en el país y en Guerrero se ha presentado el registro más elevado de contagios de Covid-19, en plena tercera ola de la pandemia.
El presidente insistió que un sector de la prensa conservadora y el grupo de Claudio X González de Mexicanos Unidos contra la Corrupción», no quieren un retorno a clases presenciales, aunque en la mayoría de las familias del país no piensan aceptar esta disposición federal, que ya ha recibido el visto bueno del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
El presidente consideró que los dos grupos en mención, «se han lanzado en contra de este propósito de regreso a clases presenciales, ya lo agarraron de bandera, aclarar que es muy importante el que se regrese a clases presenciales porque la escuela es el segundo hogar».
Se comprometió «a cuidar a las niñas y los niños, hay medidas sanitarias, protocolos que se van a aplicar, estamos llamando a autoridades estatales, municipales y padres de familias a que todos ayudemos (al regreso a las aulas); todo por la razón y el derecho, no somos autoritarios, si los padres no quieren que vayan sus hijos a la escuela, no se les va a obligar, se van a mantener los programas de educación a distancia».
López Obrador, insistió que «ya es tiempo de regresar a clases, es un asunto social y educativo, necesitamos que los niños no estén encerrados, vamos a dar a conocer dos estudios del daño que ha causado el encierro a los estudiantes y encuesta de lo que ha sucedido» y dijo que se haría en el transcurso de este viernes, para justifica el regreso a las aulas.
En la conferencia matutina en Palacio Nacional intervino la secretaría de Educación, Delfina Gómez Álvarez para decir que no son 5 mil las escuelas que han sufrido algún robo o se han vandalizado en este receso escolar por la pandemia como asegura «Mexicanos Unidos contra la Corrupción».
Dijo que son un aproximado de 10 mil escuelas de los 265 mil planteles que hay en todo el país y que ese dato lo obtuvieron directamente de los 32 secretarios de Educación en los Estados, «hay disposición de las autoridades estatales y los padres de familias para ayudarnos con pintura, algunos vidrios y se va a seguir apoyando a través del programa La Escuela es Nuestra con la que hemos atendido a 57 mil escuelas», señaló.
Informó que este viernes se van a concluir los acuerdos con los 32 secretarios de Educación del país para el regreso a clases presenciales y se presentará la próxima semana «los protocolos de salud y actividades escolares, la semana siguiente será de intensa capacitación a los profesores y la siguiente semana los consejos académicos para que se determine el regreso a clases», agregó.
A López Obrador le preguntaron de la negativa de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) a regresar a las aulas por la pandemia y las condiciones en las escuelas, «se está buscando tener con ellos un diálogo para que como el SNTE que están dispuestos a ayudar para que maestros participen, así también con la Coordinadora se está estableciendo una mesa con la secretaria, Delfina Gómez».
Y aclaró: «no es obligatorio para nadie el regreso a clases, nada por la fuerza, no somos conservadores, lo mejor es convencer, persuadir, no usar la fuerza, no amenazar, si una familia decide que no vayan sus hijos a la escuela, pues no van, van a tener la opción de la Educación a distancia», insistió.
Finalmente el presidente se dijo que con esta decisión del regreso a clases presenciales está «optimista que no se contagien los niños, si hay algún contagio que se atienda rápido, que se dé tratamiento, que se proteja a los demás, que se hagan pruebas, que se les cuide y tenemos que correr ciertos riesgos como todo en la vida», añadió.