Texto y fotografías: Fabiola Ramos Gallo
Acapulco, Gro., 19 de agosto de 2021.- Esta tarde el señor Marcelino Ramírez Guatemala denunció ante los medios de comunicación que ha sido despojado de su propiedad por parte de la Dirección de Gobernación para poder llevar a cabo el libramiento Tulcingo-La Sabana en la periferia de Acapulco.
El afectado refirió que en un primer momento se hizo presente un elemento de gobernación para tratar de negociar respecto al terreno donde tenía huertas de palmas y cañas, ya que parte de ese terreno será ocupado para la realización de un libramiento que conecte dichas zonas.
Sin embargo, ante la negativa por parte del propietario posteriormente se presentó una segunda autoridad de gobernación amedrentándolo, llegando con la orden de despejar el área.
«Me tiraron todas mis palmeras y cañas, todo esto sin mi autorización. Al principio uno de gobernación me dijo que cuánto quería y a los 5 días vino otro a decirme vamos a tumbar todo, ya venía con máquina. Yo le comenté que teníamos que ponernos de acuerdo de cómo me iban a pagar» comentó.
Abundó que el día del despojo, el agente iba acompañado de policías por lo que aunque su familia, esposa e hijas trataron de evitar la irrupción ilegal no pudieron hacer algo al respecto.
En ese sentido, el afectado dijo que únicamente está pidiendo que se le pague lo que corresponde a su propiedad de al menos 100 metros, por lo que pidió a las autoridades municipales apegarse a la ley y dar el recurso que corresponde pues se ha quedado sin su huerta afectando la economía y sustento de su familia.
A la denuncia se presentó el Presidente de consejo de vigilancia del ejido de la sabana, Mariano Molina Salinas y el Comisario municipal, Martín Sánchez Ozuna quienes reprocharon que «haya una insensible departe del gobierno municipal que nos ha golpeado con la fuerza pública y nos ha practicado desalojos o debidos sin sustento legal que respalde».
Bajo este contexto, las autoridades ejidales exhortaron a Adela Román y al Secretario General, Ernesto Manzano para llevar a cabo una mesa de diálogo para ver cómo se llevará a cabo este proyecto y que pasará con los predios afectados y la reubicación de servicios públicos ya que ahí también se ubica un tiradero de basura.
Aseguraron que esta obra viene por parte de SEDATU pero lo único que ha interesado al municipio es materializar dicha obra sin importar los daños a las más de 50 familias afectadas e hicieron hincapié respecto al temor de que se provoque una represa y la inundación en toda la localidad cuando sea temporada de lluvias, ya que no se ha comunicado tampoco hacia donde van a estar los desagües ya establecidos en el poblado ni lo que ocurrirá con el basurero a cielo abierto que está a orilla de un río.