Texto: Jesús Saavedra
Chilpancingo, Gro., 03 de febrero de 2022.- Por primera ocasión después de varios meses sin hacerlo, este jueves un grupo de normalistas de Ayotzinapa se apoderaron de un autobús del servicio público de transporte que utilizarán para sus movilizaciones.
Desde el año pasado se sabía de un acuerdo expreso entre los normalistas y los empresarios del transporte público de autobuses, de proveerles de unidades con todo y chóferes, para evitar este tipo de incidentes, que derivaron la desaparición de 43 normalistas en Iguala, ciudad a la que fueron por autobuses para su movilización del 2 de octubre del 2014.
Este jueves al mediodía salieron un par de autobuses con estudiantes desde Tixtla, con dirección hacia Chilpancingo y se pensaba que era para ir a tomar la caseta de Palo Blanco de la Autopista del Sol, donde se reforzó el operativo de resguardo que mantiene la Guardia Nacional desde el viernes pasado.
Pero los normalistas no se dirigieron a la caseta de Palo Blanco, ingresaron por el bulevar y tomaron la lateral en dirección norte-sur, hasta llegar al puente de la calle Ayutla, donde retornaron en dirección sur-norte y se quedaron esperando a bordo de los dos autobuses en el puente peatonal de la colonia López Portillo, que es por donde regularmente ingresan los autobuses para llegar a la central de las compañías Estrella Blanca o Estrella de Oro al norte de esta capital.
Ahí esperaron a que pasara el autobús número 1561 de la compañía Estrella de Oro, al cual interceptaron en ese sitio; una docena de normalistas se subieron a bordo y le pidieron al conductor que no se introdujera a la central y que los pasajeros iban a descender frente a la central de autobuses.
Uno de los pasajeros se quejó de esa acción de los normalistas, «es injusto y el gobierno no hace nada para evitar que esto suceda y afecte a las personas que vamos en tránsito, en mi caso íbamos al Instituto Estatal de Cancerología a recibir mi tratamiento y ahora tendré que esperar a que reagenden mi viaje» manifestó un señor de unos 40 años de edad visiblemente molesto.
Los normalistas lograron su cometido y se llevaron ese autobús hacia sus instalaciones en Ayotzinapa en la cabecera municipal de Tixtla.