Texto y fotografías: Staff
Chilpancingo, Gro., 24 de julio de 2022. Familiares de personas desaparecidas y asesinadas y feligreses de la iglesia del barrio de San Francisco marcharon en la capital, para exigir justicia, e insistieron a las autoridades brindar seguridad a la población ante los hechos de violencia que ocurren en el estado y país.
Minutos después de las 3 de la tarde unas 100 personas vestidas con playeras blancas, portaban fotografías de sus familiares víctimas de la violencia, veladoras y flores, partieron de la iglesia y recorrieron las vialidades aledañas hasta llegar al templo.
Los participantes colocaron en el altar las fotografias de las personas de sus familiares desaparecidos y asesinados por la inseguridad y veladoras.
El sacerdote Abel Jaramillo Hernández señaló que esta movilización es parte de la Jornada de Oración por la Paz, para exigir justicia a las personas asesinadas y desaparecidas y dar fortaleza y paz a los familiares que son víctimas de estos hechos.
Jaramillo Hernández solicitó a la gente que causan muerte, incertidumbre, miedo a las personas de salir a las calles, se toquen el corazón para evitar que hagan el mal y «pedir a Dios padre que nos mande paz y haya estabilidad social».
Reprochó que el caso del asesinato de los sacerdotes Iván Añorve Jaimes y Germaín Muñiz García, ocurrido hace cuatro años en Taxco, las autoridades de procuración de justicia no ha aclarado el doble homicidio, «hay nombres y hay sospechas quienes fueron, pero no se ha aplicado la justicia, esto demuestra que hay vinculo del gobierno y un grupo armado».
Dijo que familiares que son víctimas de la violencia acuden a las iglesias para pedir consuelo, atención espiritual, desahogo y recibir la palabra de Dios ante la falta de justicia y solicitó al presidente de México, Andrés López Obrador, gobernadores y presidentes municipales que busquen estrategias para fortalecer la paz y atender el problema de la inseguridad en el estado y país.
En la celebración de la misa se dió un minuto de silencio por las víctimas de la violencia, con motivo de la Jornada de Oración por la Paz.