Texto y fotografías: Bernardo Torres Morales
Buenavista de la Salud, Gro., 24 de agosto de 2022.- Fredid Román Román, Director del Diario «La Realidad de Guerrero fue despedido y sepultado en su pueblo adoptivo Buenavista de la Salud este miércoles por amigos y familiares, con una exigencia de justicia.
El lunes pasado, al salir de sus oficinas en Chilpancingo, capital del Estado fue privado de la vida a balazos por personas desconocidas, cuando apenas abordaba su vehículo.
El cuerpo fue velado en su domicilio, en Buenavista de la Salud, y este día finalmente sepultado.
Alrededor de las 12:00 del mediodía salió por última vez de su casa, despedido por sus hijos y nietos, acompañados por música de viento rumbo a su última morada.
En los hombros de amigos y representantes de los medios de comunicación fue llevado a los domicilios de sus familiares más cercanos, y luego a despedirse de la Iglesia de la localidad.
Al salir de la iglesia, una de sus hijas expresó su dolor, por el asesinato de su padre, a quien describió como un hombre de bien, que no hacía daño a nadie, y siempre se reservaba hablar de su trabajo con sus hijos.
Nunca supieron de alguna amenaza hacia su padre por su trabajo, dijo, quien hizo su vida en Chilpancingo, mientras que sus hijos e hijas cada uno tomó su camino, siempre contando con su apoyo.
«Yo lo único que quiero es que se haga justicia por lo que le hicieron a mi papá, pueden decir muchas cosas pero sólo Dios tiene la verdad, la gente conocía a mi papá, Dios sabe que fue un hombre bueno».
A pesar de que temen por la integridad de sus familiares, señaló que aunque callaron la voz de Fredid Román, la exigencia de justicia no la podrán callar.
«Yo muchas veces le pedí a Dios que lo cuidara y se lo llevó, entonces yo no sé si era mucho el sufrimiento aquí, que se lo llevó para cuidarlo allá».
Después de esto el féretro fue llevado al panteón, donde fue sepultado junto a su hijo Vladimir, quien también fuera asesinado el pasado 01 de Julio en el poblado del Ocotito.
Luego de depositarlo en la fosa acompañado de sus objetos más preciados, flores y luego una capa de cemento y tierra, la familia lo despidió con el grito de Justicia.