Texto: Jesús Saavedra
Chilpancingo, Gro., 22 de septiembre de 2022.- Cuando era director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la extinta PGR, Tomás Zerón de Lucio recibió de manos de policías Ministeriales y del grupo criminal Guerreros Unidos (GU), 10 restos que se presume eran de algunos de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala y “los sembró” en el río San Juan, como parte de la trama para cimentar “la verdad histórica”.
Es por ello que este miércoles el Comité de madres y padres de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala en septiembre del 2014, realizó una protesta afuera de la sede de la embajada de Israel en nuestro país en la Ciudad de México, en donde exigieron a las autoridades de ese país que colabore con el proceso de extradición de Tomás Zerón de Lucio.
En su segundo día de actividades en la Ciudad de México, las madres y padres realizaron esta actividad en la embajada de Israel en México, en donde una de las madres de un normalista desaparecido dijo que quieren “la verdad y resultados efectivos, no queremos que nos sigan engañando con detenciones de un día y el resto del año no se tenga ningún avance en las investigaciones”, aseveró.
Otra madre de familia demandó al gobierno de Israel que demuestre su “cooperación con México y no permita que un criminal esté refugiado en ese país, cuando acá cometió muchas arbitrariedades”, aseveró.,
En su intervención el abogado de los padres, Vidulfo Rosales Sierra señaló que seguirán “en las calles y en las puertas de las instituciones para exigir lo que a cada una de ellas les corresponde, del caso Ayotzinapa se han pronunciado y se ha dicho que se cometieron las más graves violaciones a los derechos humanos”.
Señaló que esos informes indican “que hubo ejecuciones extrajudiciales, desaparecieron a 43 estudiantes, de hechos de tortura, como la que sufrió el estudiante Julio César Mondragón Fontes quien fue masacrado y torturado, fue desollado del rostro, le quebraron las vértebras del cuerpo”.
Que posteriormente se realizaron torturas “en las que incurrieron funcionarios de la extinta Procuraduría General de la República, la construcción de una investigación que tuvo por objeto manipular la investigación, manipular diligencias para encubrir a quienes asesinaron y desaparecieron, eso la ley establece que son corresponsables de la desaparición forzada de esos jóvenes, de las ejecuciones extrajudiciales, de todos esos vicios”.
Y señaló que el responsable directo de esas investigaciones y torturas fue el ex director de la AIC, Tomás Zerón de Lucio “hay más de 30 videos en donde se corrobora que él participó de manera directa en torturas a detenidos”.
Rosales Sierra señaló que por ello el Comité emplazó al gobierno de Israel para “que establezca su compromiso claro con los derechos humanos y lo que establecen las convenciones internacionales en materia de tortura y de desaparición forzada, son crímenes de lesa humanidad en todos los tratados internacionales, la tortura no se permite en ningún país, menos las desapariciones forzadas y las ejecuciones extrajudiciales”.
Subrayó que desde hace más de 4 años el gobierno de Israel no atiende “la solicitud de extradición de un criminal que ha cometido tortura, desaparición forzada, la exigencia de las madres y padres de los estudiantes que el gobierno de Israel pueda actuar en consecuencia, se apegue a los tratados internacionales que prohíbe la tortura”.
Subrayó que Israel “tiene la obligación ineludible de permitir que se actúe contra esa persona, que se agilicen los trámites legales para la extradición y pueda ser procesada en México; Tomás Zerón de Lucio jugó un rol importante en la desaparición de los 43 estudiantes”.
Fue cuando reveló que “hay evidencia y prueba objetiva que se puso de acuerdo con policías Ministeriales de Guerrero y (sicarios o jefes) de Guerreros Unidos y les fueron entregados por lo menos 10 restos, los cuales Tomás Zerón de Lucio los trajo consigo y los llevó a sembrar al río San Juan”.
Acusó a Zerón de Lucio “de no solo realizar una investigación ilegal, fue por restos a Guerrero, los trajo y los sembró con la intención deliberada de ocultar el paradero de los estudiantes, de ocultar los hechos de manera criminal y de encubrir a los responsables”.
E insistió, “es fundamental y necesario que el gobierno de Israel actúe contra esa persona, o de lo contrario ese país protege a criminales y violadores a los derechos humanos y tendrá un nulo compromiso en la lucha contra la tortura, la desaparición forzada y violaciones graves a los derechos humanos”, concluyó.