Texto: Juan Blanco
Fotografía: Archivo
Chilpancingo, Gro., 07 de noviembre de 2022. – La reforma electoral propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador, podría ser producto de una venganza por parte de él contra el Instituto Nacional Electoral (INE), tras acusar en reiteradas ocasiones al órgano de incurrir en fraudes en las elecciones presidenciales del 2006 y 2012, y que supuestamente fueron las causantes de su derrota, señaló el obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández.
Entrevistado después de oficiar la misa de la 1:00 de la tarde de este domingo en la catedral de Chilapa para preguntarle su opinión sobre la visita del titular de la Secretaría de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, a Guerrero el pasado viernes 4 de noviembre como parte de su gira de trabajo por los estados del país para explicar la reforma a la constitución con la que se busca extender hasta el 2028 las tareas de seguridad pública a las Fuerzas Armadas, señaló:
«Todo lo que se haga por el bien de las personas, es bienvenido…todo lo que esté en favor del bien. Sobre las reformas que se están haciendo, primero que se garanticen los derechos humanos de todos porque primero estamos para el bien común, que ojalá le den primacía al bien de todos y después al bien particular. Eso es lo más importante de las reformas».
Sin embargo, en el caso específico de la reforma electoral que se está impulsando para, entre otros puntos, cambiarle el nombre al INE por INEC (Instituto Nacional Electoral y Consultas), disminuir de 11 a 7 el número de consejeros electorales, de 500 a 300 el número de diputados, de 128 a 96 la cifra de senadores, externó que como Iglesia Católica «defendemos al INE para garantizar el derecho de todos, para garantizar la democracia porque democracia es el poder del pueblo».
Consideró que es de aquí por donde se debe comenzar a partir para consultar a todo el pueblo y llevar a cabo la reforma, y no sólo a unos «poquitos porque de esos poquitos no se puede sacar la verdad; que hagan una consulta a la mayoría del pueblo, es decir, para que el pueblo dirija y de una manera organizada», pidió.
Y es que dijo que da a entender que estas reformas son «clandestinas» o «están mal hechas» y que por consecuencia provocan confusión, caos e incluso locura y muerte, y consideró que lo que ya no se quiere es que haya más violencia en el país y que así opinó el Papa Franciscó en su visita a México.
Respecto a sí cree que puede haber una venganza de López Obrador contra el INE en esta reforma electoral, respondió que «puede haber todo eso; en el corazón humano nacen todas estas cosas, pero parece que se siguen ideologías, ideologías hasta del extranjero a México que van contra los derechos humanos, y eso ciertamente no se acepta del presidente o de esta reforma que está haciendo».
«Si es venganza, pues mal hecho, quiere decir que no se está gobernando con la cabeza, no se está gobernando con la razón sino se está gobernando por sentimientos de venganza mal hechos para un gobierno, para un presidente», manifestó.
Con la reforma electoral del mandatario federal, también se busca que los consejeros del INEC y magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) sean propuestos por los tres poderes de la Unión y elegidos por medio de voto popular en elecciones abiertas; que el financiamiento público a partidos políticos sólo sea en campañas electorales; una reducción a 30 minutos diarios de propaganda política en radio y televisión; disminuir la participación en una consulta popular de 40 a 33 por ciento para que sea vinculante; eliminar los órganos electorales locales; e implementar el voto electrónico.