Texto y fotografías: Avigaí Silva
Chilpancingo, Gro., 02 de junio de 2019.- De acuerdo al director de derechos humanos José María Morelos y Pavón, Manuel Olivares Hernández, se necesitan al menos 10 mil elementos de la Guardia Nacional los que se necesitan para detener los conflictos de la inseguridad en Guerrero.
En conferencia de prensa para hablar sobre el conflicto que se vive en la comunidad de El Naranjo, Eduardo Neri, Manuel Olivares confirmó que el gobierno del estado miente sobre la información que ha vertido en cuanto a que todo se ha pacificado en aquella zona, pues dijo que los pobladores se encuentran desamparados y viven en zozobra por el ataque armado que sufrieron el domingo y lunes.
Uno de los temas que también abordó Olivares Hernández fue el de la Guardia Nacional, considerando que son insuficientes los elementos que envió el gobierno federal para hacer frente a la inseguridad en la entidad.
“Creemos que 500 elementos en ningún lugar sirven, ni si quiera en Chilpancingo, todos sabemos que Guerrero es un estad militarizado, es un estado donde los militares van y vienen, conviven pacíficamente, coexiste con la delincuencia y esto muchas veces se denunció.
Agregó que aunque el gobierno del estado enviara a los militares en Acapulco, Chilapa o la Costa Grande, Chilpancingo no serán suficientes para combatir a dos mil o mil 500 personas armadas en la región serrana de Guerrero.
“Todos sabemos que no, que es absurdo pensar que la Guardia Nacional en el número que están mencionando que va a estar vaya a tener la capacidad para garantizar primero la paz, la seguridad pública y el retorno de todas estas familias a sus comunidades de origen”.
El director de Derechos Humanos consideró que en Guerrero debe haber al menos 10 mil elementos de la Guardia Nacional para poder distribuirse en todas las regiones en alta criminalidad.
En Guerrero podemos decir que van entre ocho mil personas desplazadas desde el 2012 hasta la fechas, por lo que consideramos que es incorrecto llegar a Chilpancingo con cinco mil elementos, por más que los incrementen a tres mil eso no va a traer la paz ni la seguridad. Prácticamente será más de lo mismo”, consideró el director de Derechos Humanos.
Agregó que con la llegada de la Guardia Nacional será “más de lo mismo” pues recordó que el año pasado llegaron tres mil militares en el municipio de Chilapa para resguardar la zona, pero los asesinatos, las ejecuciones, las desapariciones no cesaron porque al final “la corrupción llegó hasta los mandos militares”. Por ello, consideró que el número de elementos de la Guardia Nacional no son una opción, ni una esperanza para resolver el tema de la inseguridad, por lo que insistió en que se necesitan al menos 10 mil elementos para atender los problemas de inseguridad en Guerrero.