Texto y fotografías: Bernardo Torres Morales

Nuevo Balsamar, Gro. 17 de abril de 2023.- Sin servicios de agua, energía eléctrica, escuelas ni centro de salud viven desde hace seis años habitantes del Nuevo Balsamar, reubicados cerca de Chilpancingo luego del paso de los fenómenos meteorológicos Ingrid y Manuel.

El Balsamar—comunicadad donde antes vivian—Municipio de Leonardo Bravo fue una de las que fueron devastadas en 2013, y que serían beneficiadas con el Plan de Reconstrucción «Nuevo Guerrero» que lanzó el Gobierno Federal, entonces presidido por Enrique Peña Nieto.

En un predio que denominaron «Nuevo Balsamar» que fue adquirido por la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu) en el Municipio de Eduardo Neri fueron construidas 210 viviendas, de las cuales a la fecha sólo 80 se encuentran habitadas por la falta de condiciones para vivir.

Las viviendas tienen muchas deficiencias desde su construcción, la mayoría de ellas tienen filtraciones de agua de los techos, las paredes y de los pisos, además de que el lodo que escurre se introduce a las casas.

En el fraccionamiento no cuentan con sistema de agua, y las 80 familias que lo habitan tienen que comprar pipas cada tres o cuatro días, misma que les cobra 130 pesos por llenar un tinaco de mil 100 litros, que un mes el gasto asciende a por lo menos mil 500 pesos.

El Comisario, Bulmaro Cayetano Mosso, indicó que han hecho gestiones ante el Gobierno Federal a través de la Sedatu, ante el Gobierno Estatal, pero todo ha quedado en promesas, en minutas incumplidas y solicitudes sin respuesta.

Respecto a las peticiones a las autoridades municipales, dijo que el Municipio de Leonardo Bravo se ha desentendido de ellos puesto que ahora están en territorio de Eduardo Neri, quien se niega a reconocer a esta nueva localidad, y por lo tanto no le destina recursos.

También carecen de transporte público, no hay empleos en el poblado, algunos tienen que ir a trabajar sus huertas en el Balsamar, ubicado en la Sierra de Leonardo Bravo, los hombres se alquilan como albañiles o peones en Chilpancingo, mientras que las mujeres a limpiar casas o hacer tortillas.

En el fraccionamiento no cuentan con escuelas, y toman clases en una casa prestada y en una galera improvisada con postes de madera y lámina galvanizada, prácticamente a la intemperie.

La Escuela Telesecundaria «Francisco González Bocanegra» lleva cuatro años operando en una casa prestada, donde habilitaron dos cuartos como aulas, pero carecen de mobiliario, pintarrones, equipo de cómputo y material didáctico.

La maestra María de Jesús Tavira Luviano, indicó que llevan dos años realizando gestiones para la construcción de la escuela, pues cuentan con clave y un terreno que les fue donado, pero no ha habido voluntad del Gobierno del Estado.

En esta escuela brindan educación a estudiantes no solo de El Nuevo Balsamar, sino también de la Colonia La Primavera, de las comunidades de Xalapa, Petaquillas e hijos de algunas familias que viven en el trayecto de Chilpancingo a Chichihualco.

Actualmente asisten a esta escuela 41 alumnos de los tres grados, atendidos por cuatro docentes.

La Escuela Primaria «Raúl Isidro Burgos» se encuentra en peores condiciones, apenas un techo de lámina galvanizada, pero no tienen paredes, el piso es de tierra y están expuestos al viento y el polvo.

De acuerdo con el director, había el compromiso por parte de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) de que este año se construiría la primaria, pero les informaron que ni siquiera fue incluida en el ejercicio fiscal del 2023.

Ante tal desatención por parte de los tres niveles de gobierno, anunciaron que el próximo 26 de abril acudirán a manifestarse a Chilpancingo y exigir a las autoridades cumplan con los compromisos pactados.

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