Agresiones contra dirigentes sociales y policías * Escándalo por reunión con criminales hace tambalear a la presidenta municipal Norma Otilia, quien pide licencia a fines de diciembre pero para buscar candidatura * Año riesgoso para ejercer el periodismo
Texto Rafael Solano
La violencia criminal que afectó hasta a un fiscal regional de la Fiscalía General del Estado y al delegado de Fiscalía General de la República, misma que segó la vida al dirigente de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Plácido Valerio, así como al dirigente de la sierra Rigoberto Acosta González, se vio opacada por el violento embate de la naturaleza que azotó en vísperas del festejo por los 174 años de la erección de Guerrero.
El presupuesto propuesto por el gobierno federal para resarcir los daños que causó el huracán Otis es 61 mil millones de pesos, cantidad que no será presupuesto especial para la reconstrucción sino de diversos programas sociales. Al respecto, el 3 de noviembre la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) estimó hasta en 300 mil millones de pesos rehabilitar 250 mil viviendas y la infraestructura urbana de Acapulco; es decir, cuatro veces más que el cálculo oficial.
A la par de la devastación que acarreó el fenómeno meteorológico el 25 de octubre, entre la clase gobernante hay fricciones y escasea la cordialidad política, como fue el visible caso de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y la presidenta municipal de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández Martínez. El distanciamiento se notó porque, así como no invitó la primera a la segunda a dar el grito de Independencia en palacio de gobierno, tampoco acudió al tradicional paseo del pendón con el que inicia la feria de Navidad y Año Nuevo, el domingo 17 de diciembre. Obvio que no fue esa fricción política la que hizo a la autoridad municipal pedir licencia al cargo a fines de diciembre, sino el interés en escalar un cargo mayor; en este caso, una senaduría.
No faltaron las protestas cotidianas durante todo el año que acaba de maestros disidentes, que insisten en que todavía no han derogada la Reforma Educativa del anterior sexenio priísta y, al contrario, añaden nuevas normas y reglamentos que buscan privatizar la educación y acabar con los derechos laborales. Destacaron esta vez las protestas de burócratas de todos niveles, desde bomberos a médicos, quienes reclamaron por la falta de dinero en áreas operativas.
En especial, el último mes de 2023 fue escenario de las protestas más intensas. Tan solo el 21 de diciembre, protestan jubilados por la falta de paga del tradicional bono de fin de año; al mismo tiempo, empleados del Colegio de Bachilleres toman las calles porque, aunque ya tienen tres días que los mandaron de vacaciones, todavía no les pagan la segunda quincena, bono anual y otros dos adeudos. Durante el 2023 suspendieron labores tres ocasiones.
Videos comprometedores
Aunque hubo eventos de relevancia, el 2023 se recordará a partir de febrero, ya que el lunes 13, José Deivy Barrientos Salazar, hasta ese día por la mañana comandante de la Policía Comunitaria de El Ocotito. fue detenido con drogas, armas y cartuchos sobre la carretera federal Puebla-Tehuacán, a bordo de un automóvil Mercedez Benz, según boletín de la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Puebla. Lo singular del caso es que a pesar que “El Deivy” andaba libremente de esa comunidad de Chilpancingo a la capital, en el comunicado oficial se dice que se trataba de un “objetivo prioritario”. Ese grupo de policías ciudadanos se inspiró en la policía comunitaria de la UPOEG.
Pero lo escandaloso, porque duró varias semanas, fue la difusión de videograbaciones donde aparece la primera autoridad de Chilpancingo en amena plática con delincuentes. El 13 de julio, la FGE abrió una carpeta de investigación por la reunión que tuvo Hernández Martínez con el líder del grupo criminal Los Ardillos, lo que se dio a conocer a través de una videograbación difundida en redes sociales un par de días antes.
Ya estaba iniciada la investigación cuando otros dos videos fueron dados a conocer, en donde se agrega a la reunión de la presidenta municipal de la capital, una conversación con el líder criminal, donde se queja que no la toman en cuenta en materia de seguridad (ni el gobierno estatal ni el federal), mientras que el tercero, la munícipe habla de su cercanía con el exgobernador Angel Aguirre Rivero. Se defendería diciendo que se trató de un encuentro informal en un desayuno, no concertado, ocurrido a inicios de su administración, a fines de 2021.
Previo a la difusión de los videos, en el popular barrio de San Mateo dejaron los cuerpos de tres personas ejecutadas, junto a un mensaje dirigido a Hernández Martínez en donde le recuerdan que falta un segundo desayuno.
Posterior al escándalo, inició una racha de violencia que afectó a transportistas. Crímenes a plena luz del día hicieron suspender el servicio local y foráneo. La situación hizo tambalear a la presidenta municipal, quien incluso recibió la sugerencia del secretario general de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso Núñez, de dimitir (pedir licencia al cargo), que fue rechazada de manera tajante. Por su parte, el dirigente estatal Jacinto González Varona dijo que podría ser expulsada por el presunto nexo criminal.
Aunque se mantuvo en la presidencia municipal, Hernández Martínez cesó su dinámica de celebraciones populares que venía haciendo por cualquier motivo o causa. Reaparecería hasta septiembre, en el festejo independentista. Con ánimo renovado, regresó a la dinámica de hacer festejos por cualquier motivo y tras el exitoso paseo del pendón con el que arranca la tradicional feria de Chilpancingo, anuncia que deja el cargo para buscar la candidatura al Senado. Por Morena, se supone, el partido que la llevó a una diputación local y después al Ayuntamiento.
Atentados contra policías y líderes
El 13 de septiembre, asesinaron al delegado de la FGR Fernando García Hernández, tras salir de su casa al sur de Chilpancingo; los agresores lo sorprendieron cuando abordaba su vehículo. No llevaba escolta. El hecho trascendió de inmediato a plano mundial porque tres días antes, asesinaron al fiscal regional en Tierra Caliente, Víctor Manuel Salas Cuadras, tras raptarlo de su domicilio a pesar de ser militar.
El 18 de octubre, asesinan a Bruno Plácido Valerio, líder y fundador de los grupos de policías ciudadanos o comunitarios de la UPOEG en 2013: el ataque, cuando salía con su chofer y lazarillo de las oficinas centrales de la Secretaría de Salud estatal.
El primer domingo del año 2013, el 5 de enero, Plácido Valerio al frente de un centenar de lugareños armados del municipio de Ayutla declaró que asumía el control de la seguridad local, luego de una serie de asaltos en contra de empresarios y ganaderos en donde ni las autoridades municipales ni las estatales intervinieron para investigar y castigar. Varias semanas después, se extendió por varios municipios de la región. En febrero de 2014, fue retenido por el grupo delincuencial Los Ardillos en el municipio de Quechultenango; horas después fue liberado. Eso se debió al parecer porque en enero de ese año, el empresario Pioquinto Damián Huato anunció, tras acusar al entonces alcalde Mario Moreno Arcos de estar vinculado con maleantes, la llegada de Plácido Valerio a la capital de la entidad para hacer lo mismo que en la Costa Chica. Antes, dispararon contra el empresario; desde entonces, ya no se acercaba a la capital de manera visible.
Seis días después del crimen del dirigente de la UPOEG, el 24 de octubre, asesinan a Rigoberto Acosta González, quien era profesor de la escuela de Comunicación y Mercadotecnia de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro) pero también fue durante dos décadas promotor de la creación de la Octavo Región Económica correspondiente a la zona de la sierra a través del Consejo Regional de la Sierra de Guerrero (CRESIG), que dirigía.
Ese mismo 24, en Coyuca de Benítez, región de Costa Grande, emboscan al director de Seguridad Pública y al jefe de la Policía Preventiva, Alfredo Alonso López y Honorio Salinas Garay, así como a 11 elementos, quienes perecen.
Todavía permanecía la conmoción por la masacre policial cuando de manera intempestiva, adelantándose a los pronósticos meteorológicos, el huracán Otis tocó Acapulco y Coyuca de Benítez y la atención se desvió hacia la zona afectada.
Durante los últimos días de octubre y semanas subsiguientes, la preocupación fue Acapulco y Coyuca de Benítez; de hecho, la violencia creciente cesó, aunque tan pronto se fue retornando a la normalidad, fue reapareciendo. Habitantes de Tecpan y Atoyac protestarían el 10 de noviembre para recordar que a ellos les afectó la tormenta Max dos semanas antes que pegara Otis, sin que hubieran recibido ayuda.
Agresiones a reporteros
El martes 28 de noviembre, cuatro reporteros de Chilpancingo fueron atacados a balazos cerca de las instalaciones del Sexto Batallón de Ingenieros del Ejército Mexicano y tres de ellos resultaron heridos. El ataque ocurrió luego de la cobertura del asesinato de un chofer del transporte público en la Colonia Las Palmas de esta ciudad, y en el trayecto de regreso fueron agredidos a balazos. También informaron de otros dos crímenes similares suscitados esa misma mañana del martes.
Poco antes, la FGE dio a conocer que tres reporteros y la esposa de uno de ellos, plagiados en Taxco, fueron liberados el sábado 25; seguían los operativos de búsqueda de Alberto Toledo Denova, hijo de uno de los reporteros privados de la libertad, que también fue encontrado. El domingo 19, Marco Antonio Toledo Jaimes, director del Semanario Espectador de Taxco y corresponsal de N3 Guerrero; su esposa Guadalupe Denova y su hijo Alberto fueron privados de la libertad. Y el miércoles 22, Silvia Nayssa Arce y su pareja, Alberto Sánchez, del medio digital RedSiete, también fueron plagiados.
El miércoles 29, para exigir a las autoridades competentes que no haya impunidad en la agresión que sufrieron cuatro colegas un día antes luego que regresaban de la cobertura de la ejecución de un trabajador del servicio público de transporte, reporteros de la capital de la entidad protestaron sin importar diferencias de opinión.
En la marcha participaron también afiliados a sindicatos, de organizaciones sociales, grupos campesinos, estudiantes y feligreses de la diócesis Chilpancingo-Chilapa. Inició en la explanada de la Plaza Cívica, frente el ayuntamiento en donde repudiaron la denuncia que interpuso la alcaldesa de Morena, Norma Otilia Hernández Martínez, por violencia política en razón de género contra cinco reporteros., lo que se toma como un “intento grave de censura y de provocar un ambiente de violencia contra periodistas.
También hicieron alusión a que el 16 de noviembre, en su cuarta visita a Acapulco tras el paso del huracán Otis, el presidente de la república se lanzó contra “buitres” de la información, como Televisión Azteca que hizo reportajes “y le abrieron el micrófono a gentes para que me mentaran la madre”. Afirmó que en Acapulco “buscaban, todavía lo estoy viendo, ¿saben qué buscaban? Muchísimos muertos, porque son buitres”. También se refirió a una nota de Quadratin Guerrero, donde señala que de acuerdo a las funerarias de Acapulco, hay 350 muertos. Lamentó que presenten “cualquier cosa sin pruebas; es la máxima del hampa del periodismo”.
Golpe de la Fiscalía pero reaparece violencia política
Tras el embate de Otis, la información policial destacó los casos de rapiña en el puerto turístico arrasado; de hecho, hubo escasos crímenes atribuidos al actuar de la delincuencia organizada y solo se dieron protestas de afectados por el huracán a quienes no llegaba ayuda.
El 18 de diciembre, Sandra Luz Valdovinos Salmerón informó que fue detenido uno de los presuntos autores materiales del asesinato del fiscal regional de la Tierra Caliente, es decir, Víctor Manuel Salas Cuadras. La encargada de la FGE en conferencia de prensa precisó que se trata de Max «N», presunto integrante del grupo criminal La Familia Michoacana y que el mismo 9 de septiembre de la agresión contra el fiscal regional, ingresó al hospital general de Coyuca de Catalán por una lesión en una de sus piernas.
Pero el jueves 21, reaparece la violencia, esta vez política: en la Pozolería Las Vecinas, sobre el Boulevard de las Naciones en la zona de Acapulco Diamante, matan a Ricardo Taja Ramírez, quien fue candidato a alcalde de Acapulco en la elección pasada y recién el pasado 4 de octubre, acudió a respaldar a la virtual candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum Pardo, en Chilpancingo; era de conocimiento público que buscaba ser candidato de nueva cuenta y se tenía entre los punteros porque fue el único de los aspirantes que se tomó una selfie con la candidata presidencial.
Este resumen concluye dos días antes de acabar el año; se tiene que cerrar edición por motivo técnico a pesar que todavía pudiera ocurrir algún evento político o social, algún percance causado por error humano o furia de los elementos que sea trascendente.
