Felipe de la Cruz informó que hubo una reunión con enviados de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV); recibir ayuda gubernamental «no hace que dejen el movimiento»
Texto Jesús Saavedra
Chilpancingo, 19 de febrero de 2024.- Un grupo de padres de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala y que son encabezados por el exvocero Felipe de la Cruz, sostuvo una reunión con enviados de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) del gobierno federal, quienes les hicieron saber del derecho que tienen a asistencia médica y económica.
Este lunes Felipe de la Cruz y un grupo de padres que fueron expulsados del Comité de madres y padres de los 43 el año pasado luego de haber participado en una marcha en Iguala para pedir la liberación del exalcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez, informaron del encuentro.
De la Cruz informó que acudieron a un encuentro con enviados de la CEAV y aseveró que con los padres que acudieron “no vamos a hacer un ring del movimiento de los padres de familia; únicamente queremos que sepa la sociedad que son 10 años de una lucha incansable por verdad y justicia”.
Aceptó que este grupo de padres “fueron excluidos por acciones que no le agradaron al abogado Vidulfo (Rosales Sierra) y si él me señala como infiltrado del gobierno, decimos que somos parte de las víctimas; el dolor, la frustración y el trauma que ha vivido mi hijo en esa noche”.
Aseveró que consideraron que ellos han sufrido “un daño moral, sentimental y sobre todo, los padres de familia están convencidos que en 10 años, conforme a los informes de los Expertos Independientes, son tiempos que se deben ir valorando cómo viven ellos. Tres de ellos han fallecido en la lucha de verdad y justicia,; muchos están muy enfermos de diabetes, hipertensión”.
Explicó que la semana pasada se reunieron con la Comisión presidencial para la Verdad y la Justicia en el caso Ayotzinapa (Covaj) y se acordó esta reunión con enviados de la CEAV porque “creemos que los padres, por su condición física, mental, emocional, económica, sean atendidos en sus derechos que le asisten y continúe este movimiento”.
Insistió que son víctimas de una “exclusión de Vidulfo Rosales, que maneja las decisiones de los padres a conveniencia; aunque él me señale como infiltrado del movimiento, soy víctima. Mi hijo es uno de los sobrevivientes, mi hijo está en mi casa gracias a Dios”.
Informó que en la reunión “nos vinieron a informar lo que nos corresponde a los padres de familia por tanto daño. Eso no hace que dejen el movimiento, tampoco afecta en nada, sino todo lo contrario, para fortalecer por la condición económica, física, de salud, de psicología a las madres y padres. Que la decisión la toman ellos, de manera integral. Nos manejaron apoyo, médico, psicológico, económico y todo lo que conlleva a la reparación del daño”.
Agregó que no hablaron “de cantidades; únicamente hablamos de sus derechos y usarlos, ellos van a decidir qué hacer, únicamente estamos apoyando la situación, no podemos romper un movimiento tan importante por verdad y justicia”, añadió.