En la explanada de la cancha techada se guardó un minuto de silencio en memoria del normalista abatido en un retén policial la noche del jueves pasado; exigen esclarecimiento
Texto Jesús Saavedra
Chilpancingo, 10 de marzo de 2024.- Este sábado familiares y normalistas del joven Yanqui Kothan Gómez Peralta le hicieron un homenaje de cuerpo presente en la normal rural de Ayotzinapa y posteriormente su cuerpo fue sepultado en el panteón municipal, en medio de un clamor generalizado de que se haga justicia y se aclare plenamente su homicidio.
Este sábado por la mañana el cuerpo de Gómez Peralta que yacía en un ataúd de madera fue trasladado desde su domicilio en el centro de Tixtla, hasta las instalaciones de la normal rural de Ayotzinapa.
El ataúd fue colocado al centro de la explanada de una cancha techada, donde desde hace más de nueve años se mantiene una lona con los rostros de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala.
En ese sitio estuvieron presentes familias, normalistas, la banda de guerra y la rondalla de Ayotzinapa para darle la despedida a su compañero que murió asesinado de un balazo en la cabeza en un retén de la Policía del Estado en el acceso a Chilpancingo el pasado jueves por la noche.
Sobre el ataúd de Yanqui Kothan colocaron su uniforme deportivo, unas gorras y el uniforme del Club Ciclista Guadalupano de Tixtla, del cual su abuelo fue fundador y él continuaba con esa tradición religiosa de su familia.
En el acto en la explanada de esa cancha techada se guardó un minuto de silencio en memoria del normalista asesinado; “por tu sangre derramada y regada en estas tierras guerrerenses, que harán germinar la semilla y la esperanza de la lucha inclaudicable por la continuidad del normalismo rural”, señaló en el acto un dirigente del Comité Estudiantil.
Agregó que los normalistas rindieron ese homenaje a Gómez Peralta; “como miembros de esta base estudiantil mostramos nuestro apoyo total a la familia de nuestro compañero, por ello estamos aquí demostrando esta unidad que nos distingue, esta hermandad que nos enseñan en este lugar”.
Afirmó que es “un trágico suceso que nuevamente viene a marcar a nuestra institución, pero a pesar de eso, vamos a seguir luchando, respaldando la memoria de nuestro compañero” e intervino la banda de guerra para dar un toque de silencio y la rondalla de Ayotzinapa entonó varias canciones para despedir a su compañero.
Lilia Vianey Gómez, mamá del normalista asesinado, intervino en este homenaje a su hijo; “muchos me conocen como la tía de la Cooperativa, muchos no saben que soy la mama de Khotan, del Veguetas como le decían ustedes y de todo corazón les agradezco lo que han hecho por él”.
Se dirigió a los padres de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala. “Hay que luchar para que todo esto se aclare, no hay que dejarnos, hay que seguir luchando por sus ideales. No hay que vendernos, hay que luchar para que todo esto se acabe y dejen de andar sufriendo en batallas, el gobierno siempre va a ganar con sus mentiras, los policías siempre van a ganar porque son igual, el gobierno los limpia para que queden impunes”.
Sostuvo que ahora “es una (mamá) más de los 43, me uno a ustedes, tenemos que seguir luchando”, añadió y al final otro dirigente del Comité intervino para expresar la solidaridad a la familia del normalista.
Posteriormente el ataúd y el cuerpo del normalista salió de esas instalaciones en una marcha hasta la iglesia de la Virgen de la Natividad, donde se ofició una misa y posteriormente lo llevaron a sepultar al panteón municipal.