Por deslaves de cerros, enormes cantidades de lodo, tierras y piedras invaden los carriles de circulación; ninguna autoridad, ya sea local, estatal o federal atiende las afectaciones
Texto Bernardo Torres Morales
Chilpancingo, 15 de agosto de 2024.- Decenas de pequeños deslaves, algunos que invaden todo un carril de circulación vehicular y dificultan el tránsito, así se encuentra el tramo carretero Chilpancingo-Tixtla, sin que alguna autoridad municipal, estatal o federal le dé mantenimiento.
Tan solo en el tramo que va de la salida de la capital a la altura de colonia México y hasta el punto del Cerro del Machohua se observan varios desgajamientos de cerro que vertieron lodo, piedra y pequeños árboles que obstruyen la circulación.
En algunos tramos la circulación se reduce a un solo carril y al ser una zona de curvas, pone en riesgo a automovilistas y motociclistas que utilizan esta vía diariamente.
Otro de los peligros es la gran cantidad de piedras que se encuentran tiradas sobre el pavimento, lo cual ha estado provocando daños a vehículos, principalmente ponchadura de llantas y afectaciones a la suspensión.
En todo el tramo hay una serie de deslaves que ninguna autoridad atiende; no se observa personal de ninguna dependencia de los municipios de Chilpancingo o Tixtla, del estado o del gobierno federal.