Emperatriz Alarcón Hernández señaló que le informaron del deceso a causa de un infarto, pero notó al reclamar el cuerpo que tenía una herida en el cuello
Texto Bernardo Torres Morales
Chilpancingo, 22 de octubre de 2024.- Emperatriz Alarcón Hernández lleva cuatro años exigiendo justicia, por la muerte extraña de su hijo Francisco Javier Radilla Alarcón, ocurrida en un centro de rehabilitación en el estado de Michoacán.
Ambos son originarios de la comunidad de Corral Falso, municipio de Atoyac; Alarcón Hernández expuso que durante 14 años luchó por alejar a su hijo de los vicios, pero sus esfuerzos terminaron con su muerte, cuando tenía 34 años.
Exige que se aplique la ley e investigue a la administradora o dueña del Centro de Rehabilitación «La Paloma», Marina Solís, donde su hijo estuvo internado durante 10 días, hasta el 8 de agosto de 2020, cuando le informaron de su deceso.
Ella recogió el cuerpo de su hijo en las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo) con sede en la ciudad de Morelia, capital de Michoacán, donde el médico legista y la Fiscalía General de ese Estado le informaron que se había tratado de un infarto.
Sin embargo, Alarcón Hernández afirma que al momento de reconocer el cuerpo de su hijo, le notó una herida de aproximadamente cinco centímetros en el cuello, por lo que acudió a la FGE de Michoacán, donde le dijeron que le informarían en un lapso de cuatro meses sobre dicha observación.
Seis meses después la dependencia michoacana remitió los resultados de la autopsia a la Fiscalía del Estado de Guerrero (FGE), con el mismo resultado de que la causa de muerte fue un infarto. No aceptó la versión asentada en dicho documento, puesto que ni el nombre es correcto. En lugar de Francisco Javier Radilla Alarcón aparece el nombre de Fernando Javier Blandillo Alarcón.
Las demandas que entablará, adelantó, serán en contra del médico legista que realizó la autopsia y el personal de la FGE de Michoacán que hicieron la investigación.
Pidió el apoyo de las autoridades y a la Fiscalía guerrerense su intervención para las acciones legales que tenga que emprender, a fin de saber con exactitud lo que ocurrió con su hijo en el Centro de Rehabilitación.