Texto: Bernardo Torres
Chilpancingo, Gro. 05 marzo 2020.- El conflicto agrario que mantienen desde 2013 las comunidades de Plan de Gatica y Río Azul de los municipios de Ayutla y Acatepec, ha derivado en daños ambientales, reflejados en la pérdida de bosque y la desaparición de manantiales.
En 2013, un grupo de personas se separaron de la comunidad de Plan de Gatica, municipio de Ayutla, para pasar a formar parte del municipio de Acatepec, bajo el nombre de «Río Azul», y al demandar tierras para viviendas y escuelas inició el conflicto.
Como primera acción, unas 300 personas de diferentes comunidades acompañadas por la Policía Municipal de Acatepec se posicionaron de un predio de aproximadamente cuatro hectáreas, donde metieron maquinaria para la creación de plataformas, donde construirían diversas obras.
Desde ese momento, fueron derribados cientos de árboles, en su mayoría pinos de ocote de más de 50 años, miles de toneladas de tierra que fueron vertidas en barrancas, donde había manantiales que abastecían de agua a la comunidad para el uso doméstico y agrícola.
Siete años después la situación se ha agudizado, el cambio del cauce de canales pluviales ha creado enormes grietas en los alrededores del predio, arrastrando grandes cantidades de material o escombro hacia arroyos, de donde se abastecían del vital líquido.
La misma deforestación, ha debilitado el bosque, muchos árboles han enfermado por el cambio de uso de suelo, y otros que por la misma erosión del suelo han sido derribados por el viento, agravando los problemas ambientales, en lo que antes era una pequeña reserva ecológica.
Esto trajo como consecuencia que la comunidad se quedara sin manantiales, tuvieron que cambiar las tomas de agua para uso doméstico, dejaron de sembrar hortalizas que estos «ojos de agua», les permitían.
Esto, sumado, a que durante la incursión de 2013 por habitantes de Río Azul y comunidades de Acatepec, les fueron destruidas dos redes de agua potable, que hasta la fecha no han sido restablecidas.
El conflicto agrario, se agudiza y podría derivar en enfrentamiento
El pasado 01 de marzo, habitantes de Río Azul amenazaron con bajar nuevamente con la Policía Municipal de Acatepec y posicionarse de manera definitiva del predio en disputa, pero esta vez Plan de Gatica respondió que se defenderán.
Al día siguiente los habitantes de Plan de Gatica se posicionaron del predio e iniciaron la construcción de viviendas de madera y láminas galvanizada y de cartón, a fin de impedir el ingreso del grupo opositor.
Además, ahora cuentan con una policía comunitaria, la cual fue conformada y puesta en marcha el 18 de enero de este año, aprobada por una asamblea a fin de salvaguardar la integridad de los habitantes y proteger las tierras en disputa.
El objetivo, es también proteger un cerro considerado reserva natural, donde aún hay bosque de pino y encino, y donde extraen el agua para uso doméstico y cultivos de la comunidad, y considerado como el último pulmón de este ejido.
Con un documento firmado por más de 200 habitantes, también desmienten que se trate de un grupo armado al margen de la ley como han acusado comunidades de Acatepec, pues cuentan con la autorización de prácticamente toda la comunidad de Plan de Gatica.
La corporación comunitaria, está conformada por alrededor de 30 elementos, entre policías, comandantes y consejeros, donde además de específica que sólo se usarán rifles y escopetas debidamente registrados ante la autoridad municipal.
El representante comunitario, Raymundo Nava Ventura, ha manifestado en diferentes mensajes a las autoridades estatales y federales, que su localidad no busca la confrontación y quieren vivir en paz, pero tampoco permitirán más atropellos, daños al medio ambiente y sobre todo defenderán sus tierras.