Texto y fotografía: Juan Blanco
Chilpancingo, Gro., 06 de marzo de 2020.- Militantes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en Guerrero, reconocieron que el paro nacional de mujeres, programado para este 9 de marzo en protesta por la violencia feminicida, sí pudiese estar siendo aprovechado por partidos políticos y autoridades para otros fines.
«Tal parece que puede ser aprovechado este movimiento legítimo de las mujeres, para otros fines, fines ajenos a los verdaderos intereses de las mujeres y es en donde no estamos de acuerdo», dijo en conferencia de prensa la ex candidata a la alcaldía del Ayuntamiento de Chilpancingo, Silvia Alemán Mundo.
Por lo anterior, la también catedrática de la Universidad Autónoma de Guerrero, llamó a las que participarán en esta actividad a estar alertas para que el movimiento no sea contaminado por personas ajenas a el.
Este jueves organizaciones feministas en el estado acusaron a jerarcas religiosos y a los tres órdenes de gobierno de politizar el «Paro Nacional Feminista». Estos, sostuvieron, han avalado la violencia sexual, familiar y feminicida con sus prácticas e indiferencia.
Sin embargo, reprocharon, «ahora se manifiestan a favor del ‘Paro Nacional Feminista’ otorgando permisos, convocando mujeres, y politizando nuestra causa, sin que se comprometan a aplicar el marco legal y normativo ya existente para garantizar a las mujeres y las niñas, una vida libre de violencia».
En el marco del Día Internacional de la Mujer, los militantes de Morena en el estado exigieron al gobierno de Guerrero justicia ante los casos de feminicidios y por las distintas manifestaciones de violencia contra las mujeres.
Además, solicitaron impulsar el reconocimiento y valoración de las mujeres guerrerenses en los diferentes ámbitos en que se desempeñan, sobre todo las mujeres marginadas; respetar y garantizar los derechos humanos de las mujeres.
Al Congreso del estado, compuesto en su mayoría por diputados de Morena, exigieron la armonización de las leyes locales con la «Reforma Constitucional de Paridad en Todo».
Mientras que a los tres órdenes de gobierno en general, exigieron se desarrollen oportunidades de trabajo en el campo y la ciudad para las mujeres marginadas e indígenas, a través de micro-empresas; se desarrollen políticas específicas para el desarrollo económico, social, político y cultural de las mujeres rurales e indígenas.